Semana

Seguridad ciudadana en el quirófano

Seguridad ciudadana  en el quirófano

“Gobiernos peledeístas no han podido reducir auge del crimen”, intituló su nota de prensa la reportera del periódico Hoy, Leonora Ramírez, el pasado día 12 de este mes, al que añadiré el correspondiente adobo para que los lectores de la sección Semana del periódico El Nacional degusten.

El día diez de este mes, el presidente Danilo Medina dispuso movilizar 1,200 guardias para integrarlos como refuerzo al patrullaje con la Policía Nacional, disposición que impartió en 2013 con resultados deficientes, como deficiente es la estrategia de los gobiernos peledeístas tanto del presidente Leonel Fernández como del actual gobernante en esa y otras instancias.

El día nueve de este mes, el vocero presidencial Roberto Rodríguez Marchena, declaró: “Estamos camino a derrotar muchas de las inquietudes de una sociedad por mucho tiempo y todavía marcada por la exclusión y limitado desarrollo económico e institucional”. Pura paparrucha.

El día siete de junio, el periódico Diario Libre intituló esta noticia “Delincuencia gana la batalla a autoridades; PN lanza un plan”.
En el sondeo de El Nacional del día seis de este mes, cuestionando si el plan anti delincuencia resultará, un 68% dijo que no y un 32% que sí, revelación de incredulidad y desamparo ciudadano del gobierno que preside Danilo Medina.

Otro sondeo, del periódico El Caribe, publicado el día ocho de este mes, preguntando a la ciudadanía si cree adecuado el combate a la canalla, un 96.5% dijo que no.

En medio de este universo de suspicacia, Medina, flemático como un lord inglés, se disparó el día once de este mes con la graciosura, en relación al control de la delincuencia con un: “Hay que esperar”, una salida bufa a una materia en que el PLD es deciente, como en salud pública, haitianización, medio ambiente, impunidad a la corrupción y tolerancia absoluta para que todos hagan lo que les venga en ganas irrespetando las leyes y las buenas costumbres perdidas.

Desde hace un tiempo más que prudente, voces de todos los sectores de la vida civil, dirigentes políticos, religiosos, Conep, Industriales de Herrera, Industriales de Santiago, Finjus y otras firmas más, han postulado por diseñar un programa anti delincuencia eficaz, que ningún ministro del Interior ni jefe policial de los gobiernos del PLD han concebido, con la agravante de crecer desmesuradamente la delincuencia, el crimen atracos en las calles, un 90% por motoristas irregularizados, robos de partes de vehículos estacionados en las calles, robos en residencias, muertes por doquier, sin que el presidente Medina se inmute.

El efectivo control de la canalla consiste en tres ejes, el primero, enfrentar a los delincuentes sin miramientos y reducirle drásticamente el censo en varios miles, procediendo como señala el reportaje de The New York Times insertado en Listín Diario del día doce de este mes, ilustrando que el Ejército mexicano no retiene a los heridos que enfrenta en la guerra contra los carteles del narcotráfico, sino que los elimina, como hizo Lee Kuan yu en Singapur y hace el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, que sale a las calles escopeta calibre 12 al hombro a matar delincuentes.

El segundo eje, expresado por varios, inclusive el suscrito desde tiempo inmemorial, consiste en crear las Unidades Sociales Barriales, que integre a Promese, Inespre, Conep, dirigentes religiosos, políticos y deportivos, unidades médicas y odontológicas, Zonas Francas Industriales, en un edificio construido para esos fines en cada barriada de la capital, para atender al pueblo indefenso en salud, alimentos, medicinas, empleos, deportes, asistencia psiquiátrica y religiosa.

El tercer eje estriba en reformar la obsoleta ley 36 que tiene diez años engavetada en el Congreso cuando el diputado Víctor Bisonó Haza la introdujo en la Cámara Baja, en 2006 y sepultada, porque los primeros que rechazan desarmarse son los legisladores.

La Ley 36 tiene que reformarse para que solo se permita la tenencia y nunca el porte de armas de fuego a nadie que no fuesen militares y policías en servicio, y todo individuo sorprendido portando un arma de fuego con o sin permiso, condenado a cinco años de prisión y dos millones de pesos de multa, sin fianza, eliminando totalmente los formularios 25 que expiden los institutos armados y policiales. La segunda vez diez años de prisión y diez años de prisión, sin fianza.

La legislatura debe modificarse para conceder permiso de tenencia en hogares, negocios, fincas, con demostración de intereses a proteger, con un examen previo integrado por psiquiatras y sicólogos competentes y serios, concluyendo la expedición por interés fiscal a cualquier pelafustán, como es el caso deprimente y peligroso actual, y nunca a un condenado por delincuencia o deportado de Estados Unidos por ese litoral y narcotráfico.

Toda estrategia para controlar en su máxima expresión la ola delincuencial y criminal que tiene aterrada a la ciudadanía, que nadie se atreve a caminar unas cuadras en ningún sector barrial y residencial por temor a ser asaltado, robado y hasta muerto por un simple celular, una cartera, una cadena, un reloj, por la inseguridad que significan las calles desprotegidas de patrullas policiales, comprobado por todos, será una tomadura de pelo y otra prueba fehaciente más de que el PLD es incapaz de contener a la canalla y devolver el sosiego y la seguridad perdida en los gobiernos de esta organización política.

Es sotto voce de que si los presidentes Leonel Fernández y Danilo Medina hubiesen dedicado la mitad de sus esfuerzos en reelegirse a enfrentar la delincuencia, medio ambiente degradado peligrosamente, haitianización que socava la soberanía nacional, impunidad a la corrupción y permisivismo para que todos hagan lo que quieran porque controlar resta votos, esas lacras latentes y perversas que corroen la sociedad dominicana se hubiesen superado por mucho.

¿Exagero?, ¿Me “pasé” un poquito?, ¿Dónde? Que los lectores sean los jueces.

El Nacional

La Voz de Todos