Opinión

Sellos postales

Sellos postales

El sello postal ha sido y sigue siendo un efectivo instrumento de unidad y añoranzas.   Prueba al canto en la magnifica exposición filatélica  durante el presente  mes de septiembre, en Novocentro,   rememorando una época que nos luce pretérita, arropada por los enormes avances de las telecomunicaciones. Expresión de una era, en la que se asociaba el comportamiento de los gobiernos con la calidad de los servicios de correos. “Estados Unidos marcha como marcha el Correo”, llegó a decir un presidente norteamericano.

Encuentras estampillas de casi un centenar de países. Pero llama la atención la singular muestra binacional con los rostros de Duarte y Alfaro, héroes cimeros de Republica Dominicana y Ecuador. Revela la fraternidad de de dos países que han encontrado en las correspondencia análogas el medio de proyectar su hermandad, rescatando sus glorias. La presencia del embajador del Ecuador, Carlos López,  en la apertura de esta feria postal nos indica su interés por asuntos nuestros. Destaca, asimismo, la asistencia de otros dignatarios de Estados Unidos y Japón, entre ellos.

No faltan los tajantes modernistas, resistentes a reconocer el valor a la tarea de clasificar sellos, sobres y otros documentos postales es un asunto caduco, comprendido ya en los avances electrónicos de este tercer milenio. Y posiblemente tengan alguna razón, lo cual  resalta aún más la importancia del evento.

Hay, entonces, rasgos de audacia y originalidad que confieren mayores meritos a los organizadores, sobre todo al Instituto Postal Dominicano, donde Modesto Guzmán ha logrado conciliar las mas modernas y sofisticadas ofertas con las tradicionales.

En los sellos queda grabada la historia nacional o regional de los países a través de figuras de personajes ilustres, monumentos, pinturas, flora y fauna. Recrea, en ello, el esfuerzo artesanal de hombres y mujeres, como estafeteros y carteros a pie y en bicicletas  entregando cartas, día a día,  casa por casa. Esto es, cargados de esperanzas.

Precursores de la presente época tecnología, donde se sintetizan casi cien años de  este pedacito de papel ilustrado, de cortes dentados para facilitar su desprendimiento y uso. A pesar de que el correo postal existe desde hace casi tres mil años, el primer sello posta no fue impreso y utilizado en 1840 en el Reino Unido. En nuestro país, el primero fue acunado quince años después, conforme datos suministrados por la Sociedad Filatélica Dominicana.

El Nacional

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