Los Ángeles. EFE. El futuro inmediato de la informática pasa por los ordenadores de bolsillo, un nicho de mercado a medio camino entre el teléfono móvil y el portátil en el que un surtido de tablets, e-readers y netbooks compiten por atraer a un mismo tipo de consumidor.
Sin novedades revolucionarias en cuestiones de software, las empresas tecnológicas han comenzado a buscar un nuevo producto que aúne tamaño reducido y altas prestaciones, una pugna aún sin vencedor que ha quedado escenificada en el campo de batalla de la mayor feria del sector, Consumer Electronics Show (CES), que se celebra hasta el domingo en Las Vegas (Nevada).
Si 2009 fue el año de los netbooks, miniordenadores de bajo coste que salieron para contentar a quienes consideraban que los portátiles eran demasiado aparatosos, el cambio de año ha constatado que en 2010 se popularizarán los lectores de libros digitales o e-readers que, al margen de su función literaria, han ido introduciendo otros servicios propios de una computadora al uso.
La frontera entre el ordenador y el lector digital quedó definitivamente difuminada esta semana con el desembarco de los anunciados tablets o slates, especies de pizarras con pantalla táctil y de dimensiones similares a sus primos netbooks y e-readers que recuerdan a las antiguas PDA pero equipadas para convertirse en una plataforma multimedia de bolsillo y con acceso a internet.
El primero en disparar en esta dirección fue Microsoft que dejó entrever su tablet fabricada por Hewlett-Packard, un prototipo que vio la luz en la presentación realizada el miércoles por su consejero delegado, Steve Ballmer, que sirvió para inaugurar esta edición de CES.
Ballmer no entró en detalles sobre el dispositivo, aunque mostró sus 10 pulgadas de pantalla táctil y explicó que contaba con sistema operativo Windows7 y serviría como e-reader, reproductor de vídeo y puerta a la web.
Otras versiones de tablets que se exhibieron sin concretar fecha de salida al mercado fueron Ultra del fabricante ICD o la propuesta de Dell, aunque sus dispositivos apuntaron hacia una herramienta de conexión a internet más que al concepto expuesto por Microsoft, lo mismo ocurre en el caso de Sony, que enseñó su modelo al que calificó de visor personal de internet”.
El 2009
El 2009 fue el año de los miniordenadores de bajo costo y para este 2010 se prevé que el reto será popularizar los lectores de libros digitales o e-readers, que aparte de su función literaria ha ido añadiendo otros servicios propios de una computadora.