El Ministerio Público no había solicitado esta mañana medida de coerción contra los cuatro acusados de recibir como soborno 3,520,000 millones de dólares en la compra de ocho aviones Súper Tucanos destinados a combatir el narcotráfico, entre los que están involucrados un ex secretario de las Fuerzas Armadas, un coronel y dos empresarios.
A media mañana permanecían arrestados en la cárcel del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva el exjefe militar, mayor general Pedro Rafael Peña Antonio y los empresarios Daniel Aquino Hernández y su hijo, Daniel Aquino Méndez; dueños de la empresa 4D Business Group y/o Kantor.
En tanto que el coronel Carlos Piccini, asistente de Peña Antonio, era interrogado en la Procuraduría Especializada en Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), que dirige Laura Guerrero Pelletier.
Los oficiales y empresarios fueron detenidos en la tarde de ayer al presentarse a la Pepca, tras una orden del juez José Alejandro Vargas, coordinador de los Juzgados de Instrucción del Distrito Nacional.
Peña Antonio es acusado de dirigir e impulsar todo lo relativo al soborno transnacional practicado por ejecutivos de la Empresa Brasileña de Aeronáutica (Embraer).
En tanto que el coronel activo de la Fuerza Aérea, Carlos Piccini está acusado de ser el brazo ejecutor de la trama de corrupción.
Guerrero Pelletier ordenó el arresto del mayor general Peña Antonio al resistirse a comparecer a la Pepca, alegando que debía esperar la autorización de sus superiores en el Ministerio de Defensa.
Los empresarios Aquino Hernández y su hijo Aquino Méndez, fueron arrestados por su vinculación a dicho soborno por la compra de los aviones entre los años 2007 y 2011.
Guerrero Pelletier informó que evalúa las pruebas para determinar la medida de coerción que solicitará y que en el caso hay involucrados legisladores.
