Opinión

Sismos: lo mejor que puede pasar

Sismos: lo mejor que puede pasar

La parte este de la isla de Santo Domingo ha sido sacudida en las últimas semanas por varios sismos de pequeñas magnitudes, lo que ha permitido que la fallas tectónicas que hay sobre nuestro territorio liberen poco a poco la energía acumulada.

En caso contrario, esa energía permanecería atrapada y entonces correríamos el riesgo de que fuera liberada de un solo golpe y tuviéramos ya no un sismo sino un gran terremoto.

De acuerdo a los especialistas en el tema, mientras más sismos leves se producen en una zona, menores son las posibilidades de un terremoto de magnitud de más de siete grados, que son los provocan daños graves, porque derrumban edificaciones y mueren personas.

Nuestro pedazo de isla está en una de las zonas del Caribe vulnerables ante terremotos, y la historia nos cuenta que varias han hecho estragos en República Dominicana, incluyendo un tsunami a principios de la década del 40.

Ahora, la pregunta que se hace la mayoría de la gente es hasta qué nivel estamos preparados para enfrentar una catástrofe producida por un terremoto de más de siete grados.

No recuerdo que en las escuelas donde estudian mis hijas se haya hablado del tema a los estudiantes, ni  en las universidades. Tampoco existe una campaña a través de los medios de comunicación que oriente a la población sobre las medidas que deben adoptan ante una situación de emergencia.

De modo que las autoridades del COE u otro organismo oficial deben diseñar y ejecutar una campaña de orientación, no sólo en los medios de comunicación sino también realizando simulacros en escuelas, colegios, universidades, plazas comerciales u otros lugares de grandes concentraciones de personas.

Escuelas y universidades deben ser lo básico, ya que desde allí los muchachos podrían convertirse en agentes multiplicadores ante familiares y vecinos.

Eso hay que hacerlo ahora, antes de que la desgracia llegue, de modo que después del problema no se pretenda buscar culpable. Es ahora, y la responsabilidad es de las autoridades gubernamentales.

El Nacional

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