El Nacional
El secretario de Salud Pública conformó hoy una comisión de funcionarios que se encargará se investigar la situación del hospital psiquiátrico Padre Billini, para que presenten las recomendaciones para solucionar los problemas que afectan al establecimiento.
El doctor Bautista Rojas Gómez dijo que la comisión la integran los doctores Lucas Gómez y José Mieses Michel, directores de los Servicios Especializados de Salud y Salud Mental, respectivamente, así como por el director general de Ingeniería de la cartera, ingeniero Andrés Pichardo.
El pasado sábado un reportaje publicado en El Nacional describió las condiciones deplorables del edificio, la falta de higiene y las pésimas atenciones que reciben los pacientes internos en el sanatorio psiquiátrico Padre Billini, reflejando que el hospital parece ser un centro de torturas.
Sobre el particular, el titular de Salud Pública afirmó que ayer visitó el Padre Billini para observar personalmente la situación, y que constató que debe buscársele una solución urgente.
Esta es la razón por la cual estamos designando una comisión de funcionarios de Salud Pública a fin de que haga un descenso y presente una propuesta viable a la mayor brevedad posible, agregó.
Dijo que el propósito de la actual gestión de la cartera que dirige es iniciar un proceso en procura de mejorar la infraestructura y la operatividad en sentido general del centro asistencial, ubicado en Pedro Brand, en la provincia Santo Domingo.
Rojas Gómez reconoció, sin embargo, que no se trata de solucionar todos los problemas a corto plazo, porque una buena parte de la problemática que presenta El Manicomio se ha acumulado desde hace varias décadas.
Expresó que en la actual coyuntura hay voluntad para ir resolviendo la situación, pero también pedimos la colaboración de la sociedad en general ante una problemática de tanta sensibilidad como resulta la salud mental en cualquier parte del mundo.
En el centro de atenciones psiquiátricos por antonomasia que se conocía como El 28, se ven muchos pacientes de ambos sexos tirados en el piso, algunos desnudos, salpicados de heces fecales y vómitos.
El tétrico panorama es más patético en pacientes catalogados por las autoridades del hospital como irrecuperables, que sólo aguardan la muerte entre las cuatro paredes de la edificación que construyó Trujillo en 1957.
