Editorial

También allá

También allá

Estados Unidos, que sufre una crisis colosal a causa de la especulación y el insaciable apetitito de riqueza de banqueros inescrupulosos, necesita muchos ciudadanos con un discurso a favor de la justicia, como el que predica su embajador en República Dominicana.

Al censurar el incremento de la corrupción y el efecto negativo que la ominosa práctica tiene para la inversión, Robert Fannin ha reivindicado los procesos judiciales como ejemplos para quienes, como los banqueros de su país, se consideran inmunes para vulnerar leyes y principios.

No es que se rechacen los sanos y bien intencionados consejos del diplomático estadounidense, y máxime cuando se sabe que por aquí es necesario enfrentar la lacra de la corrupción y fomentar el Estado de derecho para atraer inversionistas extranjeros.

Y, sin que sirva de consuelo, al menos en algunos casos por aquí se ha hecho justicia. Pero en Estados Unidos, quizás por la ausencia de ciudadanos con el criterio de Fannin, todavía los banqueros que hundieron la economía a través de prácticas especulativas no han sido ni siquiera interrogados.

De todas formas, ¡thank you, Mr. Fannin!

El ramillete

En ácidas críticas al Gobierno y al partido oficial, el  doctor Hugo Tolentino Dipp emite reflexiones sobre  asuntos que competen a la sociedad toda, como las  debilidades que atribuye al proyecto de Reforma constitucional, fragilidad en controles fronterizos y auge de la delincuencia.

El ex canciller ha calificado de inmoral y de  expresión de atraso político a la propuesta de modificación de la Constitución que impulsa el Gobierno, y le señala el propósito de garantizar la reelección “absoluta y sin límites” para el presidente Leonel Fernández.

Tolentino Dipp se refirió también a lo que califica como progresivo declive moral, que afecta a élites partidarias y a determinados sectores privados a los que atribuye beneficiarse del enriquecimiento ilícito al  amparo del poder o de la influencia que éste genera.

Al participar como invitado especial  en el Almuerzo Semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio,  el vicepresidente del PRD definió a la frontera como un colador al servicio del tráfico ilegal de haitianos,  con la  complicidad del Estado, sectores  militares e intereses del vecino país.

El índice acusador de tan notable intelectual  ha señalado a los integrantes del Comité Político del PLD y vertido criticas a la dirección del PRD, aunque lo más resaltante, lo que debería motivar la atención nacional, ha sido su afirmación de que en el país la corrupción lo ha permeado todo.

El Nacional

La Voz de Todos