Víctor Estrella lloró de la emoción
Víctor Estrella, el tricampeón de la ATP, lloró de la emoción cuando derrotó ayer al italiano Paolo Lorenzi en tres sets.
“Ha sido algo inolvidable. El corazón se me quería salir. Estoy muy orgulloso, pues son muchos los dominicanos que estaban muy pendientes y querían mi victoria”.
Hablé anoche con Víctor vía celular y lo sentí muy emocionado.
“Leo, me preparé física y mentalmente para poder competir con esos grandes tenistas, pues sabía que la tarea no era fácil y muy ardua”.
Y luego me dijo: “Es algo grandioso poder ganar tres campeonatos en forma consecutiva. Estoy ahora entre esos atletas que son élite del tenis mundial”.
Víctor Estrella, como siempre, no dejó de mencionar a su querida República Dominicana.
Valoró que cuando ganó, cientos de asistentes extranjeros se pararon de sus asientos para aplaudir “por la gran hazaña que hice y el juego, pues me enfrenté a un competidor de muchas garras y con deseo de triunfar”.
Entusiasmo
Estrella dijo que salió a la cancha con mucho entusiasmo y decisión.
“Cuando vi que dejó la bola en la malla, fue algo que no tengo palabras para describir la emoción. Lloré y sentí el orgullo patrio”.
Reconoció que fue una gran victoria y reiteró que son pocos los que han ganado tres campeonatos en forma consecutiva.
Víctor, de 36 años de edad, partió esta madrugada hacia Argentina donde estará en otro torneo de la ATP.
En la misma semana viajará a Brasil para estar en dos campeonatos de los cuales ofreceré más detalles.
Ranking ATP
Víctor destacó la importancia de que estará en un buen lugar en el ranking de la ATP.
Del lugar 156 en que se encontraba antes de ganar el Abierto de Ecuador, Víctor se colocó en el puesto 93.
La súper estrella del tenis internacional me indicó que había ofrecido una conferencia de prensa a la que asistieron centenares de periodistas internacionales de mucho conocimiento y seguidores del tenis.
Estaremos pendientes desde mañana para ver cómo le va a nuestro compatriota en los campeonatos de Argentina y Brasil.
Hasta mañana, si Dios quiere, dominicanos.
