Opinión

Todavía estamos a tiempo

Todavía estamos a tiempo

Oquendo Medina

Sabía que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) terminaría presentándose, ante la sociedad dominicana, tal y como lo está haciendo hoy día. Don Juan, maestro del análisis sociopolítico, nunca se equivocó cuando habló acerca del comportamiento del pequeño burgués y su desmedido afán por ascender en términos político y económico.

Lo supe desde aquel día en que el PLD decidió dejar de ser un partido de cuadros y al mismo tiempo abandonar los círculos de estudio, su correcta metodología de trabajo y su férrea disciplina interna para entonces convertirse en una organización de masas (mayoritaria), en donde la indisciplina, la desorganización y la pérdida de valores se convierten en el pan nuestro de cada día.

No podemos negar que el PLD se ha convertido en una envidiable y poderosa maquinaria electoral, además de ser el partido político más importante que actualmente existe en la República Dominicana. Sin embargo, nunca imaginé que los cambios serían tan rápido y a veces hasta mortificantes.

Resulta que ya las contradicciones de forma se tratan y se discuten de manera abierta, a través de los medios de comunicación; con el agravante de que muy lamentablemente son miembros del comité político quienes le están echando leñas al fuego.

Todavía estamos a tiempo. El presidente Danilo Medina y Leonel Fernández tienen que llamar a la cordura y a la prudencia a algunos miembros del órgano que tanto defendió Juan Bosch. No olvidemos que ya estamos inmersos en la campaña electoral.

El Nacional

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