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Héctor García

La Serie del Caribe

Una de las tantas frases del actor y comediante mexicano Mario Moreno (Cantinflas) dice: “Los países subdesarrollados tienden a desarrollarse dentro de un desenrollamiento natural porque si no nos enrollamos”.
Pensamos que estamos “enrollados” en cuanto al montaje en febrero del 2018 de la Serie del Caribe de Béisbol en el Estadio Panamericano en Zapopan, Guadalajara, México.
Y lo estamos porque después del paso del huracán María, por Puerto Rico, nación que resultó devastada, amén de los daños causados a los estadios, es muy cuesta arriba que allí se juegue el campeonato invernal.
Agregue usted al “enrollamiento”, la difícil situación política de Venezuela, donde el “gobierno” de Nicolás Maduro tiene gran interés de montar el campeonato de pelota, pero la realidad es otra.
Piensan los ejecutivos del béisbol de Venezuela, que jugarán con peloteros nativos, aunque algunos anuncian la contratación de extranjeros. ¡Ellos están entusiasmados!
Pero, nosotros también eliminamos ese torneo, pero no nos “enrollamos” por la capacidad que tienen los dos restantes países, México y República Dominicana para suplir el evento.
Se trataría de una Serie del Caribe importantísima con dos equipos mexicanos y dos dominicanos. Sin dudas, que sería un evento para recordar.
Es lamentable la situación que vive la Confederación de Béisbol del Caribe, dirigida por el cauto y entusiasta doctor Juan Francisco Puello Herrera, hombre que planifica sus acciones y que siempre tiene una carta bajo su manga derecha.
Es probable que después de presenciar lo acontecido en Puerto Rico y reconocer en su interior lo de Venezuela, él vaya pensando en salvar nuestro gran evento beisbolero, con los equipos campeones y sub campeones de la Liga del Pacifico de México y la Liga de Béisbol de la República Dominicana.
Con esos cuatro conjuntos la casa de los Charros de Jalisco estará bien engalanada, porque se tratará de un tremendo torneo de béisbol.
¡Es buena la opción! ¿Verdad?

TOQUECITOS…Como se estaba esperando El Toro Raúl Mondesí, mi amigo personal, la semana pasada fue condenado por un tribunal del distrito judicial de San Cristóbal, a ocho años de cárcel domiciliaria, luego de haber sido encontrado culpable, en primera instancia, de malversación de fondos por más de 300 millones de pesos, mientras ejerció la función de alcalde del municipio cabecera de la provincia San Cristóbal…La condena ha sido portada de los principales periódicos deportivos de los Estados Unidos, de los países hispanos y de aquí también…Es un caso que todavía le queda mucha vida en los tribunales, pero mientras el hacha va y viene, Mondesí está condenado…Raúl se enganchó él mismo a político y cometió el grave error de “cambiar de chaquetas” en oportunidades, lo que le cerró puertas muy importantes…Es ahí el espejo…El Toro no se supo manejar en la vida política, que no era la de él, como tampoco lo supo hacer en el terreno de juego donde desperdició sus cinco herramientas, fracasando con Dodgers, Blue Jays, Yankees, DiamondBacks, Piratas, Angelinos y Bravos de Atlanta… El dominicano ganó en sus 13 temporadas 66 millones 470 mil dólares… ¿Qué fue a buscar ese muchacho a la política?

El Nacional

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