República Dominicana se prepara para reanudar en el corto plazo las exportaciones de carne a Estados Unidos después de más de 30 años de veda por incumplimientos de normativas sanitarias, lo que permitiría el relanzamiento de la ganadería nacional afectada por baja rentabilidad.
El Ministerio de Agricultura y la Junta Agroempresarial completan un programa destinado a lograr la equivalencia sanitaria con Norteamérica, que consiste en el establecimiento de 175 fincas modelos y la certificación de mataderos industriales.
Los productores reciben asistencia técnica y capacitación para mejorar la gestión y producción en lo referido a calidad, nutrición, reproducción y sanidad animal, lo que incluye también mejoría en los sistemas de ordeño y en las fincas lecheras.
El programa de Fortalecimiento de la Ganadería Nacional cuenta con un financiamiento del Departamento de Agricultura de Estados Unidos por 21 millones de dólares y 25 millones de pesos aportados por el Gobierno, lo que ofrece confiabilidad en que finalmente se exportará carne a territorio estadounidense.
Los productores de carne, leche, pollo y huevos no se benefician del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, porque no cumplen con los parámetros sanitarios y de inocuidad requeridos por ese mercado, aun así se producen aquí unos 200 millones de pollos y dos mil millones de huevos al año.
Es claro, pues, que República Dominicana posee potencial suficiente para satisfacer la demanda local en carnes, pollos y huevos y exportar hacia Estados Unidos, Centroamérica, Europa y Taiwán, para lo cual se requiere cumplir con estándares sanitarios en fincas, granjas y mataderos.
La fortaleza del sector productivo nacional se expresa en su capacidad de suplir el consumo local estimado en unas 25 mil reses y cerca de 15 mil cerdos mensualmente, además de más de 15 millones de pollos y 150 millones de huevos.
El Gobierno y la ganadería tienen que agarrarse de las manos con toda firmeza para lograr que de nuevo se abran las puertas de Estados Unidos para las exportaciones de carnes, lo que también abrirá mercados regionales y mundiales, en beneficio de miles de productores y de la economía nacional.
