BOCA CHICA.- Alrededor de nueve restaurantes y cafeterías fueron arrasadas esta madrugada por un incendio en el área de la playa de ese polo turístico de Boca Chica. Las causas del siniestro que provocó perdidas millonarias están siendo investigadas por las autoridades policiales y el Cuerpo de Bomberos de la zona.
Un informe de los diferentes organismos y las autoridades que inciden en Boca Chica indica que el incendio se inició a las 11:00 de la noche del miércoles y fue sofocado a la 1:45 minutos de la madrugada de este jueves por los bomberos tanto de ese municipio como del Distrito Municipal de La Caleta.
Entre los negocios destruidos por el incendio se encuentran restaurante Sonia, propiedad del señor Jesús Armando Severino; Cafetería Yaribel, de Ramón Taveraz; cafetería Carmen y Sandy, que era propiedad del señor Luis Alfredo Calzado; Colmado J-M, de Yerinel Jaques; Cafetería Quico, de Francisco Guante y Freiduria-cafeteria Venecia.
Se informó que la cafetería Venecia con más de 25 años de operación, era uno de los negocios más visitado por personas, debido a las excelentes atenciones de sus propietarios y a que los servicios de pescado, comidas variadas, entre otros alimentos, se brindaban a precios justos y de buena calidad.
Al momento de producirse el incendio, en la playa se encontraban decenas de personas compartiendo en la playa, siendo desalojadas por las autoridades policiales, municipales, de la Armada Dominicana y del Cuerpo Especializado de la Policía Turística (Cestur), entre otras instituciones.
El operativo de retiro de las personas de la zona de la playa y sofocación del incendio fue dirigido por el jefe del Cuerpo de Bomberos de Boca Chica, coronel Juan Francisco Mejía Castro, acompañado de jefe del Departamento de Operaciones, teniente coronel Francisco Matos, quien tiene a su cargo investigar las causas del incendio y las perdidas.
Unos 20 miembros de los bomberos tanto de Boca Chica como de LA Caleta participaron en la sofocación del incendio dos horas y 45 minutos después de haberse iniciado, logrando impedir que otros establecimientos fueran afectados. No hubo personas lesionadas durante el siniestro que provoco gran pánico en el lugar.
Los coroneles Mieses Abre, supervisor de Cestur en Boca Chica y Luis Telleria, comandante policial de la plaza, tuvieron que utilizar altos parlantes, pidiendo a las personas que abandonaran en lugar para evitar que fueran afectadas por las llamas.
