La violencia que se esparce por el territorio cobró otras dos víctimas, con la muerte a tiros del dueño y de un cliente de un “deli market” en el sector Evaristo Morales. Además de las muertes de José Miguel Ortiz Hilario, de 43 años, y Rubí Javier Bejarán Estévez (El Rubio), amplifica la incertidumbre asaltos como el perpetrado por siete encapuchados en un cajero automático del Banco de Reservas, ubicado en la estación de combustibles Aurora, en Yaguate, San Cristóbal.
La muerte de las dos personas en el “deli market” ejecutada por un desconocido y el caso del cajero automático incrementan el temor en la población. La víctima de ola criminal y delictiva puede ser cualquiera, sin importar el lugar dónde se encuentre.
Versiones indican que un hombre que llevaba puesta una gorra negra y un “T-shirt” oscuro entró al “deli market” con una pistola y sin mediar palabras disparó repetidas veces contra el comerciante y el cliente. Un caso que deja mucho qué pensar.
