Opinión

Vivencias cotidianas de allí y aquí

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Personal Shopper, un espléndido regalo para empezar bien el año

 

A pesar de que la profesión de Personal Shopper no es del todo nueva, pues nació en Nueva York durante la década de los 80, en nuestro país acaba de estrenarse. En la actualidad se ha extendido ya a las principales ciudades del mundo occidental. Uno de sus fines consiste en ayudar a realizar sus compras a aquellas personas a las que su apretada agenda se lo impide. Pero también está dirigida a aquellas que desean renovarse y no saben por donde empezar.

 

Un Personal Shopper es un asesor que orienta a sus clientes a elegir y comprar objetos de diversos tipos. Su función principal consiste en asesorarles y mostrarles las nuevas tendencias de la moda. Pero también guiarles en la decoración de su hogar, e incluso, ayudarles a elegir regalos y a organizar eventos.

 

El Personal Shopper suele acompañar a sus clientes a las tiendas, estableciendo rutas de compra personalizadas, aunque también puede realizar dichas compras por su cuenta, siempre  por encargo de los mismos, como es obvio.

 

Las principales cualidades que debe poseer este experto son:  Ser culto, tener buenos modales y poseer un gusto refinado. Debe gozar de gran capacidad de percepción y diplomacia, además de saber relacionarse con cordialidad. Importante es que sepa captar las necesidades de su cliente. Es primordial que tenga buenos conocimientos sobre las características de los comercios de la ciudad en los que se realizarán las posibles compras. Debe, además, destacar por su excelencia y experiencia en Relaciones Públicas.

 

Este profesional desarrolla varias funciones como son el estar “a la última” en las tendencias más actuales e identificar los deseos y las necesidades de sus clientes. Debe de estar bien capacitado para realizar un rápido análisis de la morfología de los mismos.  Esto tiene como objeto el saber evaluar y proporcionarles una correcta recomendación tanto en el ámbito de la moda, la peluquería o el maquillaje. Imprescindible también es que sepa gestionar las compras y la contratación de los servicios con la mejor relación calidad-precio posible.

 

Haydée Trujillo, una excelente representante de esta profesión en nuestro país, ha estado, desde siempre, involucrada en el mundo de la moda. Sus conocimientos nacieron, y se forjaron, en Europa, su cuna natal, según sus propias palabras.

 

– Como profesional del sector, dedicaré todo el tiempo necesario en dar una atención individualizada a mis clientes. Les aconsejaré sobre lo que les conviene tener y conservar en su armario, en función de sus características físicas  e incluso emocionales. Desarrollaré un profundo estudio sobre cuales son los colores que les convienen, basándome en su tipo de piel, cabello, ojos y personalidad. – afirma  la joven – Les ayudaré, asimismo, a mejorar su imagen, y la de su hogar, si así lo desean, mediante el apoyo de nutricionistas, esteticistas, peluqueros, e incluso arquitectos y/o decoradores.-

 

Haydée está dedicandose, con gran empeño, trabajo, ilusión y energía para intentar imponer esta profesión, a la que ama, en nuestro país, derrochando buen gusto, equilibrio y simpatía. Nos comenta y aclara, además, que el uso del vocablo “shopper” podría dar lugar a confusiones pues parecería que el mismo nos induce, obligatoriamente, a comprar. – Eso no es del todo cierto ya que, entre mis funciones, está también el acompañar a mis clientes a su hogar con el fin de ayudarles a escoger y armonizar la ropa y complementos que ya posee.-

 

Aída Trujillo Ricart  http://aidatrujillo.wordpress.com/

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