Propósitos para este nuevo año
Como todos los años, al empezar uno nuevo, nos hacemos una serie de propósitos, nos prometemos realizar proyectos que habíamos incumplido, nos ponemos metas, etcétera. El problema es que, en múltiples ocasiones, no los llegamos a realizar. Y eso hace que nos sintamos, en cierto modo, culpables.
Sin embargo repetimos…
Muchas veces lo conseguimos y nos sentimos orgullosos de nosotros mismos.
Aunque saben muy bien a lo que me refiero, me voy a dar la licencia de mencionar algunos de estos propósitos.
En el aspecto físico somos muchos los que nos proponemos el acudir regularmente a un gimnasio, del tipo que sea. Caminar, correr, hacer algún deporte…
También, para quien desee adelgazar, uno de sus fines es comer menos. Lo contrario de quien quiere engordar que se empeña en hacerlo con más empeño, llegando a veces, en ambos casos, a acudir a un médico especialista para conseguirlo.
El fumador se empeña en dejar de hacerlo, o reducirlo.
Al igual que el que consume bebidas alcohólicas en exceso. Sobre todo si éstas provocan situaciones violentas y/o desagradables.
A quien no le va bien en el ámbito familiar, llega hasta a rezar para que su situación cambie, más cuando se siente responsable de ello.
Toma, por fin, la decisión de divorciarse o de casarse.
Y, así, una lista interminable…
Pero pienso que lo peor que podemos hacer es anclarnos en el “tenía que haber”, “podía haberlo hecho y no lo hice” y un sinfín de pensamientos negativos que lo único que consiguen es bloquearnos y que sigamos actuando del mismo modo.
Mi opinión es que, si volvemos a repetir cayendo en no hacer lo que estábamos resueltos a cumplir, en vez de ofuscarnos y culparnos, nos demos la oportunidad de empezar de cero.
Es como cuando un bebé empieza a intentar dar sus primeros pasos. Se cae, al principio, como es lógico. Pero después vuelve a intentarlo hasta que caminar se convierte en algo natural y espontáneo. Ya, el pequeño ni se lo plantea sino que lo hace.
Sin abandonar nuestras metas, sigamos repitiendo lo que nos habíamos propuesto hasta conseguirlo, aunque sea en parte.
Al fin y al cabo tenemos un año por delante…
Seamos amables, aunque rigurosos, con nosotros mismos.
Empecemos de a poquito porque, cuando se quiere hacer todo de golpe, muchas veces se falla y entonces no llegamos a realizar lo que queremos hacer. Repito, nos bloqueamos.
¡Feliz Año Nuevo a todos!
