SANTIAGO. Comunidades de la Línea Noroeste comenzaron la madrugada de este viernes a ser inundadas, como consecuencia de la crecida del río Yaque del Norte producto del desagüe de la presa de Tavera.
Además de los daños causados en pueblos como Castañuelas, Palo Verde y La Guajaca, la riada también ha afectado plantaciones agrícolas, especialmente de bananos y plátanos.
Los efectos del desagüe de la presa comienzan a sentirse este viernes en la Línea Noroeste por lo menos tres días después de iniciado.
Decenas de casas y establecimientos comerciales de ese municipio de la provincia de Montecristi se hallaban esta mañana inundados, obligando a sus residentes refugiarse en diferentes lugares.
A principios de esta semana desde el embalse Tavera-Bao comenzaron a ser liberados 320 metros cúbicos por segundo a través de todas sus compuertas.
Esto con el objetivo de reducir la cantidad de agua ante el anuncio de que ayer una parte del país sería afectada por el poderos huracán Irma, pero hoy solo se están descargando 55 metros cúbicos por segundo al río Yaque del Norte, con una unidad de turbinación.
El caudal de entrada es de 127 metros cúbicos por segundo.
Se informó que la condición hasta esta mañana del embalse es de 316.80 metros sobre el nivel del mar, siendo su cota máxima de 327 metros.
