No hay dudas de que el aparataje que se montó ayer para apresar a los supuestos implicados en los sobornos de Odebrecht era innecesario, ya que todos los detenidos habían acudido a los requerimientos del Ministerio Público, durante los cinco meses que duró la investigación.
Sin embargo, hay que reconocer que los asesores en materia de comunicación del procurador general de la República no iban a perder la oportunidad de capitalizar esa coyuntura.
Con los 14 apresados fueron satisfechos a media los reclamos de la sociedad, aunque insisto que el método atropellante que se empleó era innecesario, por tratarse de figuras públicas que en ningún momento mostraron intención de huir del proceso.
Además sería difícil entender, porque el Ministerio Público pide considerar el caso complejo después de cinco meses de investigación y de asegurar que en el sometimiento ante la Suprema Corte de Justicia están todos los que son.
Aparataje de ayer buscaba protagonismo mediático
Eso indica que no falta nadie en el expediente. 14 implicados, siete ligados o dirigentes de partidos de la oposición y siete dirigentes o relacionados con el partido de gobierno. como si se procurara balancear o equilibrar la justicia.
Pero si durante las investigaciones de la Suprema Corte de Justicia salen a relucir otros nombres, el Ministerio Público tendría que retractarse ante la sociedad, porque hay que suponer que muchos de los implicados manejan más informaciones que la que han revelado hasta el momento.
A todos los detenidos comenzarán hoy a conocerles medidas de coerción, mientras a los legisladores hay que esperar que las cámaras le quiten la inmunidad parlamentaria para poderlos procesar, lo que podría tardar varios meses en producirse. Un privilegio de ley, pero la ley es la ley.
Insisto, declarar el caso complejo fue una exageración del Ministerio Público, cuando se supone que tiene todas las aristas del caso, a menos que se pretende ser gracioso ante la presión de una sociedad que está demandando justicia, pero para todos.
