– Los Angeles. AP. Pocas semanas antes de morir, Jenni Rivera estaba desganada y pensativa, con altibajos emocionales a raíz de su divorcio con Esteban Loaiza y su pelea con su hija mayor Chiquis, según escenas de la última temporada de I Love Jenni.
Episodios de la serie de realidad simulada obtenidos por The Associated Press muestran a la artista poco antes de morir en un accidente aéreo en México el 9 de diciembre del 2012. Jenni era auténtica y natural y se sentía como se sentiría cualquier otra mujer que se encuentra en una circunstancia parecida. Pero estaba saliendo adelante. Por ratos se sentía decaída y por ratos reía, dijo a la AP su hermana Rosie Rivera, quien quedó a cargo de Jenni Rivera Enterprises, empresa que aglutina los patrimonios de la artista. Lo que veo es a una mujer victoriosa, no una víctima de circunstancias.
La intérprete de éxitos como De contrabando, Culpable o inocente y La gran señora estaba pasando momentos muy difíciles en su vida personal. Aparte de su divorcio, había tenido un pleito con Chiquis, situación muy dura e inusual para Rivera, quien protegió a sus hijos a viva voz.
Jacqui y Michael Rivera, también hijos de la cantante, confirman el distanciamiento en un segmento de la temporada que inicia el 14 de abril por el canal de cable mun2. En otra escena, la intérprete le dice a su hermana que ya no quiere a Loaiza. La cantante anunció su divorcio el 3 de octubre ¿Todavía amo a Esteban? ¡No! … Tengo este poder horrible, hermana, de bloquear a la gente de mi corazón, dijo la cantante y empresaria a su hermana. En otro momento su hermana le pide que no se aventure pronto con algún pretendiente, lo que lleva a una de las ocurrentes frases de Rivera.
No te estreses, hermana, esta vagina está bajo candado», bromeó la artista.