SANTIAGO. La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) y la Alcaldía arribaron la tarde de ayer a un acuerdo que busca poner fin a la litis legal, mediante la que reclaman el pago de millones de pesos de deuda por servicio prestado, así como por retención de pago de arbitrios.
Se acordó que la empresa acuífera desembolsará 28 millones de pesos que le retiene al cabildo, por concepto de cobro de la recogida de basura correspondiente a los meses de mayo y junio pasados, pago que hacen los santiagueros a través de la factura de agua potable y alcantarillado.
Mientras que la Alcaldía aceptará que Coraasan cobre a sus instituciones los 12 meses del servicio de agua en la actual gestión, dinero que será reducido de 45 millones de pesos que fueron retenidos a la pasada administración, encabezada por Gilberto Serulle.
Con el dinero restante se acordó que Coraasan adquirirá terrenos propiedad del municipio y que son utilizados por esa empresa, donde ha construido oficinas comerciales y estaciones de bombeo.