El Nacional
CHICAGO (Sun Times).- Más duro para un jugador que pasar por una racha perdedora es ver una, sabiendo que no puede ayudar.

Esa es la frustración por la que pasa el tercera base de los Cachorros Aramis Ramírez, bregando con su propia lesión en su hombro mientras ve a sus compañeros luchando con su peor racha perdedora en años.

Es duro (mirar) porque yo no puedo ayudar. Todo lo que puedo hacer es mirar, dijo el martes. Todo el mundo está frustrado. Nosotros sabemos que somos mejores que como estamos jugando ahora mismo. Es por eso que todo el mundo está frustrado.

Ramírez estaba bateando .364 con cuatro jonrones y 16 empujadas cuando se dislocó su hombro izquierdo el 8 de mayo al tirarse al suelo buscando una línea. La suya será una larga ausencia, con el estelar jugador no esperado hasta quizás después de la brecha del Juego de Estrellas. El hoyo en tercera base ha estado ha estado resplandeciendo, no solamente por la falta de un verdadero tercera base para llenar defensivamente sino porque Ramírez es uno de los mejores bateadores de la Liga Nacional.

Pero Ramírez no cree que la ofensiva esté pasando problemas porque él está fuera.

Tenemos tipos que pueden recoger la toalla cuando estoy fuera, dijo. Nosotros simplemente no hemos bateado de la forma que queremos. El lunes, bateamos, pero no pudimos conseguir el pitcheo.

Ramírez dijo que su hombro está mejorando, pero que está lejos de comenzar a hacer trabajo de béisbol.