José Rafael Sosa
BERLÍN. Alemania. Esta capital alemana tiene encanto y sello propios para el visitante. Berlín esta premiada de atractivos y ofrece un abanico amplio, en el cual pasado monumental y presente moderno y comercial, danzan al mismo tiempo.
Estuvimos en Berlín con motivo de la 42 Feria Internacional de Turismo (ITB), invitados por el Ministerio de Turismo en la que 189 países competían para atraer el turismo a cada destino de origen, y aprovechamos para conocer esta urbe, recorrerla en tren y a pies, cara a cara con sus ciudadanos.
No es casualidad que la Unesco declarara a Berlín como “Ciudad creativa” en el 2006, lo que no se imaginaban sus fundadores en 1237 cuando la bautizaron como Coll, para pasar a ser luego la capital del Reino de Prusia (1701.1918), capital de Weimar (1919-1933) y del Tercer Reich (1933-1945).
Con un una población que ronda los tres millones y medio de habitantes, es la más poblada de Alemania y la quinta de los países de Unión Europea.
Lo que no contarán ninguno de los folletos ni la papelería turística de Berlín es de que se trata de una urbe amigable a partir de su gente, contrariando el prejuicio de temperamento fuerte y terminante de los alemanes.
Cuando se les trata en la calle, procurando una dirección o destino, el alemán en muy atento y ofrece las mejores orientaciones.