Señor director:
Lo que escribo a continuación, es reflejo del trato que he recibido como ciudadano representado por la Dirección de Información y Defensa de los Afiliados a la Seguridad Social.
Me dirijo a una empleada.
¡Saludos, Maribel! ¿Qué tal?
Espero que hayas tenido un bonito fin de semana. Como afilado de la Seguridad Social, representado por la DIDA, estuve llamándote a tu extensión, el vienes 15 de marzo. Creo que cogiste el teléfono, y como en otras ocasiones, dijiste: ¡Aló!, No se oye tengo que irme a una reunión y se cerró el teléfono. Eso me dio tristeza, porque reconocí tu voz.
Considero que es parte del servicio humano atender a mis llamadas telefónicas.
Voy a tomarme esta oportunidad para pedirte (pues no puedo exigir), que por el amor de Dios, es imperativo que de la (DIDA) le envíen una comunicación a la CNSS, notificándoles que yo, como ciudadano y afiliado, a una supuesta Seguridad Social, estoy consciente de que han violado mis derechos por sus constantes violaciones a los reglamentos de apelación según la ley 87-01; ya que después de mas de ochos meses no existe ninguna comunicación sobre el estatus de dicha apelación, y mucho menos una resolución solicitando explicación.
¿Puede la DIDA hacer eso?
Maribel, ustedes no dan respuesta a las comunicaciones de los afiliados, a menos que sean estas aprobada por la jerarquía de la DIDA. Te suplico que solicites esa autorización inmediatamente y por lo menos me notifiques que recibiste esta comunicación. Vale la pena recodarte que mi expediente tiene cerca de tres años de existencia sin ningún resultado. Continúo optimista y rezándole a Dios por algún resultado positivo.
Consideramos que la directora de la DIDA, Nélsida Marmolejos, debe tomar carta en este asunto. Me gustaría que la DIDA se vea bien, y si yo no me veo bien, no se va a ver bien. Personalmente, ya estoy cansado de tanto abuso de una seguridad social que más bien es una inseguridad social. El tiempo lo definirá todo.
Maribel, gracias por ignorar casi todas mis comunicaciones.
Termino así mi planteamiento a Maribel. ¿Será posible que esta situación se prolongue sin tiempo?
Atentamente,
Lic. Ricardo Yvan Tejeda G.
Afiliado DIDA.