El sueldo 14
Señor director:
No sé qué esperan los congresistas, los empresarios y todos los que pueden tomar decisiones para instituir de una vez por todas el sueldo número 14, en un país en que la gente gana poco dinero y la vida es cara.
Tengo sólo dos hijos y no me he podido reponer de la catástrofe económica que me causó la compra de los útiles y el pago de colegiatura.
No importa que el gobierno distribuya algunos útiles entre estudiantes pobres, es insostenible la carga en la mayoría de los hogares, porque la preparación para un nuevo año escolar implica un alto costo, dado que a los niños hay que comprarles incluso suficiente ropa, zapatos y calcetines, y todo esto es costo en nuestra sociedad.
No es que uno quiera politizar el tema, pero si el Estado desconoce su obligación de brindar educación gratuita a la gente, si todo es costoso, si los colegios suben las tarifas cuándo les da la gana, lo menos que pueden hacer los empresarios y los legisladores es ponerse a una e instituir, de una vez por todas, el sueldo 14.
Con la escuela pública no se puede contar. Inscribí a mis hijos hace dos años en un centro cuyo nombre me reservo, pero que se tiene por muy bueno en el área educativa, y la verdad es que no quedé conforme. Allí se trabaja con muchas carencias y la calidad académica es deficiente.
No regateen más y den el sueldo 14, que no alcanzará para comprar todo lo que se necesita en ese momento, pero podría ser un paliativo.
Atentamente,
Danistela Santana
Santo Domingo
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La leche
Señor director:
Me inquieta mucho el tema de la calidad de la leche, porque la verdad es que uno no encuentra cómo alimentarse y alimentar a sus hijos de manera que le esté llevando los nutrientes esenciales, los que se dice se encuentran en los alimentos que uno consume.
El alimento es esencial para la salud, es la medicina preventiva que conocemos.
Por eso, cuando vi recientemente que aquí se vende leche que no es leche y queso que no es queso, me quedé muy preocupado.
Sería muy importante que la gente recibiera orientación sobre la leche que puede consumir, sobre el queso de calidad auténtica.
Atentamente,
Rufino Mejía
Santo Domingo