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Como cada Domingo José Rafael Sosa

Como cada Domingo José Rafael Sosa

Ha terminado Edanco 2018. Ha sido una jornada de danza, luces, Caribe y nobleza del gesto danzario. Hemos tenido, expresiva, la fuerza de la danza de este tiempo del XIV del Festival Internacional de Danza Contemporánea, fundado por el maestro Edmundo Poy, en 2005, cuando no había mucha claridad sobre los caminos que recorrería el evento.
Había en el ambiente del ballet criollo de la modernidad, tanto dudas como esperanzas. Incertidumbre sobre su sostenibilidad en el tiempo y la esperanza de que se pudiera concretar como encuentro anual que relacionara a quienes hacen de la poesía del cuerpo en movimiento, su principal objetivo vivencial en escenario.
Es que se trataba de un encuentro costoso y logísticamente desafiante, que implicaba grandes recursos económicos, mucha coordinación previa, concertación de voluntades, tomando en cuenta las agendas de las compañías.
Hoy día se muestra que el proyecto se ha transformado en el vínculo con el resto del mundo del quehacer danzario dominicano contemporáneo.
Ha concluido Edanco 2018, inaugurada el pasado 24 de septiembre con la actuación de 23 compañías internacionales con 24 funciones durante sus 14 días de duración: México, Panamá, Costa Rica, Puerto Rico, Canadá, Venezuela, Martinica, Estados Unidos, España, Colombia y Corea del Sur.
Por el país, los anfitriones la Compañía Nacional de la Danza Contemporánea, el Ballet Nacional Dominicano, Compañía Nacional De Danza Contemporánea, Teatro Popular Danzante, Ballet Teatro Dominicano, Ballet Concierto Dominicano, Ballet Alina Abreu, Escuela Nacional De Danza.

El Nacional

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