Concluirá este viernes el juicio seguido al propietario de la casa de cambio Hermanos Solano, Carlos Julio Solano, en el Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional a quien en noviembre de 2009 la Fiscalía incautó más de 50 millones de pesos.
El juicio que lleva el testigo clave del proceso, el doctor Blas Minaya, presentado por la Fiscalía, dijo a los jueces que había advertido a la Fiscalía del Distrito Nacional que el caso se iba a caer en los tribunales porque nunca depositaron las pruebas que remitió la Superintendencia de Bancos.
Esas pruebas no fueron incorporadas por el Ministerio Público, yo había advertido a la Fiscalía que el caso se iba a caer como está ocurriendo, dijo Minaya.
Precisó a los jueces Alina Mora, Rafael Pacheco y Natividad Ramona de los Santos que la Superintendencia de Bancos impuso sanciones administrativas correspondiente al pago de una suma de dinero la que ha sido objeto de reconsideración y que está pendiente el recurso jerárquico por parte de la Junta Monetaria.
Fui varias veces a la Fiscalía para que incorporaran las pruebas y eso no ocurrió, por lo que no hay pruebas en ese expediente, indició.
Minaya compareció al juicio en su calidad de director del Departamento de Sanciones de la Superintendencia de Bancos.