San Juan (EFE).- Cuatro asesinatos a balazos de registraron en menos de 12 horas en incidentes separados en San Juan y tres localidades de sus alrededores, después de que el pasado fin de semana concluyera en Puerto Rico con 11 muertes violentas.
El primer asesinato reportado este sábado por la Policía puertorriqueña fue el perpetrado en Vega Baja, donde en el sector Las Piñas los agentes encontraron el cuerpo de un hombre tirado en el pavimento.
El occiso, que no ha sido identificado pero que tiene una edad aproximada de 25 años, presentaba múltiples heridas de bala en diferentes partes del cuerpo, según el comunicado policial.
También antes de la medianoche, esta vez en el pueblo de Naranjito, un hombre murió y otro resultó herido de bala en la zona de Barrio Nuevo. De acuerdo a la información preliminar, las dos víctimas transitaban en un vehículo Toyota Yaris por la carretera 164 cuando fueron blanco de múltiples disparos efectuados desde otro coche que se cruzó en su camino.
El fallecido, un residente de Naranjito de 34 años, recibió impactos de bala en diferentes partes del cuerpo, mientras que su acompañante, de 39 años, resultó herido pero su condición es estable.
Unas tres horas después, ya en la madrugada de este sábado, los agentes del municipio de Canóvanas encontraron durante su ronda preventiva el cuerpo de un hombre en la orilla de la carretera 186.
La víctima, que no ha podido ser identificada por ahora, tenía varias heridas de bala en diferentes partes del cuerpo.
Por último, en el barrio de Puerto Nuevo en San Juan se reportó también de madrugada otra muerte violenta en la urbanización Santiago Iglesias, adonde llegó la Policía tras ser alertada de unos disparos y encontró casquillos de bala.
En ese lugar, un joven de 22 años había resultado herido de bala. Sus familiares lo trasladaron al Hospital Centro Médico de Río Piedras, donde falleció.
Al momento todos estos casos están siendo investigados y no ha trascendido el móvil de los mismos, aunque gran parte de los asesinatos que ocurren en la isla se tratan de ajustes de cuentas vinculados con el tráfico de drogas.