Santo Domingo (EFE).- Las peleas de gallos podrán volver a celebrarse en el país, sin la presencia de público y siempre que cumplan los protocolos sanitarios para la prevención del COVID-19, informaron este martes fuentes oficiales.
El ministro de Deportes, Francisco Camacho, así lo deja establecido en una comunicación que envió al presidente del mayor coliseo para la lidia de gallos del país, quien en una carta previa le solicitó la reanudación de las peleas de manera virtual.
El funcionario, cuyo ministerio es quien regula ese tipo de actividad, expresa en la misiva “que no tiene objeción” a la celebración de peleas de gallos siempre y cuando cumplan las medidas de prevención contra el coronavirus.
“Este Ministerio de Deportes y Recreación no tiene objeción para estos fines, siempre y cuando se cumpla con el protocolo establecido por el Ministerio de Salud para el cuidado y prevención del COVID-19 de nuestros ciudadanos”, dijo Camacho en la carta dirigida a Nelson Hernández, presidente del Coliseo Gallístico de Santo Domingo.
La autenticidad de la carta fue confirmada a Efe por el portavoz del Ministerio, Primitivo Cadete.
El director de Comunicaciones de Salud Pública, Ulises Jiménez, dijo a Efe que ese organismo no se opondría a la celebración de peleas de gallos sin público, si sus organizadores cumplen con medidas sanitarias de distanciamiento físico, uso de mascarillas y desinfección de las manos.
“Si se realizan (las peleas) bajo estas condiciones, el Ministerio de Salud lo permite, ya que esta actividad forma parte de la economía del país y el comercio ha sufrido mucho los estragos de la pandemia”, refirió.
Las peleas de gallos, legales y consideradas un deporte en la República Dominicana, fueron suspendidas desde marzo pasado cuando el Gobierno tomó una serie de drásticas medidas de corte económico y social para evitar el contagio del coronavirus, que de todas maneras se propagó por toda la nación.
A pesar de la suspensión de las peleas debido a la llegada de la pandemia al país, el pasado marzo, varios de estos locales han sido sorprendidos en los últimos meses celebrando peleas de manera normal en varias zonas del país.
La República Dominicana acumula 2.101 muertes por el COVID-19 y 111.900 contagios, y en estos momentos la tendencia está a la baja, lo que ha llevado a las autoridades a relajar el horario del toque de queda y a permitir actividades deportivas, que estuvieron prohibidas durante las fases más agudas de la pandemia.
