Lorca ,España. EFE. El mayor campamento de evacuados por el terremoto que la semana pasada devastó Lorca, integrado mayoritariamente por inmigrantes, empezó hoy a ser desalojado en esa ciudad del sudeste de España, donde murieron nueve personas y unas 300 resultaron heridas por sismo.
Los equipos de emergencia y el Ejército han dispuesto un nuevo campamento unificado de 1.400 plazas en otra zona, adonde serán trasladados sólo aquellos damnificados cuya situación ha sido verificada, como la de los residentes en Lorca que no pueden regresar a sus hogares.
El resto de los que permanecían en el campamento desalojado, así como los que están en los otros dos campamentos habilitados serán trasladados a los lugares de origen en otras localidades de la región de Murcia, o se les facilitará el transporte si vivían fuera de esa comunidad autónoma.
Durante los últimos días, se han detectado personas que no han resultado damnificadas por la catástrofe pero que, no obstante, acudían a los campamentos para conseguir comida y mantas. Hasta ayer, más de 3.500 ecuatorianos y entre 100 y 150 bolivianos seguían alojados en los campamentos, según la ministra de la Secretaría Nacional del Migrante (SENAMI) de Ecuador, Lorena Escudero, y la cónsul de Bolivia en Murcia, María Celia Orellana.
Por otro lado, el edificio que ayer iba a ser demolido en el barrio de La Viña de Lorca (el más dañado por el sismo) por los graves desperfectos que tenía se desplomó hoy mientras operarios municipales trabajaban en su demolición. Sin embargo, no se registraron heridos, ya que la zona se encontraba acordonada desde ayer, según indicaron fuentes de la empresa que llevaba a cabo los trabajos de derribo. Entretanto, el ministro español de Fomento, José Blanco, firmó hoy el convenio de gestión de las ayudas para reconstruir Lorca.
El ministro explicó que, con el convenio, los afectados recuperarán un derecho esencial como es el poder dormir bajo un techo mientras se reconstruyen sus viviendas.