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El voto presidencial

Por Antonio Almonte
(aalmonte@hotmail.com).-

La gran fecha, la gran oportunidad que desde hace más de un año espera el pueblo dominicano para darle un giro a su vida es la elección de un nuevo presidente, no un alcalde municipal.

Ese solo dato indica que las elecciones municipales pasadas recogen solo una parte del gran disgusto nacional acumulado contra el PLD. Significa también que en las presidenciales la cosecha de votos por el cambio será ampliamente mayor.

Hace exactamente un año, el seis de mayo del 2019, una encuesta Gallup revelaba que el 58% de los dominicanos consideraba que lo mejor para el país “seria que gobierne otro partido”.

Más aun, el mismo sondeo indicaba que el 46% quería un cambio radical y el 32% un gran cambio. Es decir, en resumen, que un 78% de los ciudadanos pedían un cambio político de algún tipo en el país.

Luego, en la encuesta de enero de este 2020, la Gallup midió que el 64.6% de los dominicanos quiere que el país sea gobernado por un partido “diferente al PLD”, de los cuales el 70% eran jóvenes de edad entre 18 y 24 años.

Precisamente los mismos jóvenes que un mes después, a finales de febrero, irrumpieron en masas en las principales ciudades del país con movilizaciones impresionantes y consignas estrictamente políticas, como castigo a los culpables del sabotaje de las elecciones del 15 de febrero y renuncia de la Junta Central Electoral. Es decir, Gallup midió en enero, con la precisión de un relojero, el sentimiento que ya reinaba en el pecho de nuestra juventud.

Por su lado, la encuesta Greenberg-Diario Libre del 30 marzo último también reveló que el 60% de los electores prefieren que ascienda al poder un partido político “diferente al PLD”.

Pero lo más revelador de esa encuesta es que el 72% considera que Luis Abinader “representa el cambio”.

En encuestas similares publicados por el prestigioso “Centro Económico del Cibao”, aparecen porcentajes similares sobre la misma cuestión.

En resumen, el pueblo dominicano lucha y busca hace tiempo un cambio presidencial, de partido, más que de síndicos y regidores.

El Nacional

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