Otra negativa situación se está desarrollando en el sector eléctrico dominicano. A pocos meses de la inauguración del presente gobierno, los funcionarios del sector eléctrico han provocado una gradual prohibición del acceso del público a las estadísticas sobre producción, distribución y cobro de la electricidad.

Y, de acuerdo a mis averiguaciones, tal parece que los números a ocultar corresponden, principalmente, a las empresas distribuidoras.

Los portales electrónicos de esas empresas no ofrecen ninguna información relevante sobre sus indicadores técnicos y financieros. No hay forma de que EdeNorte, EdeSur o EdeEste informen al público cuáles son sus ingresos, pérdidas, deudas, inversiones, tasa de cobertura del servicio, tarifas, subsidios y otros indicadores.

Se recuerda que aun bajo el acoso sin pausa de los «apagones financieros», los ex administradores de la CDEEE, Radhamés Segura, Cesar Sánchez y Celso Marranzini ordenaban la publicación trimestral en papel y en electrónico del Informe de Desempeño del Sector Eléctrico, un extenso material estadístico sobre las actividades productivas, comerciales y financieras de ese mercado.

Sin embargo, en los últimos meses de la presente gestión el portal electrónico de la CDEEE mantiene abierta todas las ventanillas de información, menos la del Informe de Desempeño. Se ha bloqueado el acceso al informe final del pasado añ0 2012 y el correspondiente al primer trimestre del 2013 no aparece ni como anuncio.

Más aún, en el reporte publicado en noviembre 2012, los datos sobre los montos del subsidio a la tarifa de julio a diciembre entregados por el gobierno a las distribuidoras no aparecen, en contraste con el último informe de la gestión de Marranzini que contiene las cifras completas del primer semestre de ese año. Todos los informes de la CDEEE antes de Bichara publicaban ese importante dato.

Por su lado, la nueva directiva de la Superintendencia ha casi inhabilitado su página web y las estadísticas que publicaba sobre algunos aspectos de las distribuidoras también han desaparecido.

Lo que sucede es que la crisis de las distribuidoras es muy grave y el responsable casi único ha sido el PLD y sus gobiernos.