Editorial

El parecido

El parecido

Quizás porque representa el principal destino de la emigración dominicana, Estados Unidos se ha convertido en principal referente para el diseño de la agenda pública y para elaborar discursos políticos o corporativos sobre economía y sociedad.
Tan influyente ha sido ese modelo que el anterior presidente, doctor Leonel Fernández, prometió convertir el entorno urbano en un “Nueva York chiquito”, en referencia a las bondades que ofrece esa urbe estadounidense donde residen más de un millón de conciudadanos.

Por su crecimiento inmobiliario vertical, túneles y elevados y por el metro de Santo Domingo, puede decirse que la capital dominicana pretende un perfil algo parecido a la mentada “Torre de Babel”, con quimérica desproporción guardada.

Todo residente en esta tierra insular tiene un pariente o relacionado que cuenta sobre lo fascinante que resulta vivir “en el primer mundo”, donde todos los servicios básicos, incluido el de la seguridad social, están garantizados, aunque se admite que cada historia se relata con conveniente dosis de fantasía.

Siempre será de buen provecho para una colectividad o ciudadanos en particular identificar referentes exitosos como norte, más aun si se trata de una nación que en menos de 200 años se convirtió en la primera potencia económica del mundo.

Sería un craso error pretender emular a esa nación en lo referente a su descomunal afán consumista, su devastador poder militar o en cualquier expresión de la enfermedad que padece, denominada por el Papa Juan Pablo II como “capitalismo salvaje”.

Estados Unidos es grande, no por el Pentágono, por la Casa Blanca, el Congreso, la CIA o el FBI, sino por su Constitución Política y su sistema de justicia, que funciona casi a la perfección, lo que permite que todos sus ciudadanos conozcan y disfruten de sus derechos.

Cuando todos los dominicanos sean iguales ante la ley, cuando se respete cabalmente la Constitución del Estado y se aplique el régimen de consecuencia contra todo infractor, sin importar su relevancia social o política, ese día, República Dominicana tendrá un gran parecido a Estados Unidos.

El Nacional

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