PHOENIX.- Si alguien pensó que el Clásico Mundial de Béisbol era intrascendente en Estados Unidos y, quizás hasta para sus peloteros, debió darse una vuelta al estadio este fin de semana.
Un total de 110,705 personas pagaron boleto para ver los cinco partidos del torneo en el Chase Field de Phoenix durante los tres días de competencia en ese estadio.
«Esto ha sido un ambiente como de playoffs o mejor», consideró David Wright. «La gente, los jugadores, todos vamos entiendo mejor este torneo conforme avanza. Es un orgullo representar a nuestro país, aquí delante de toda esta multitud».
Estados Unidos perdió su primer juego, frente a México, para después derrotar a Italia y Canadá para hacerse del primer lugar del Grupo D y viajara Miami para la segunda ronda que abrirán frente a Puerto Rico, este martes.
Wright y el resto de los peloteros estadounidenses reconocieron que se dieron más cuenta de que la responsabilidad de representar a su país, en casa, era grande después de enfrentar a México.