Los primeros tres juegos de Gary Sánchez fuera de la lista de lesionados se parecían mucho al tramo que conducía a su segundo período en el estante.
No está bien.
Dos juegos no garantizan que el bateador ultra talentoso esté a punto de lograr una fuerte final de seis semanas para la temporada, pero Sánchez parece un bateador diferente de lo que era el pasado fin de semana cuando salió por primera vez de la IL.
“Hice algunos ajustes, definitivamente me siento mejor en estos dos últimos juegos”, dijo Sánchez después de que su jonrón de tres carreras en la primera entrada frente a Dylan Bundy destacó un rally de cuatro carreras que ayudó a los Yankees a ganar 6-5 sobre los lamentables Orioles. frente a 43,909 miércoles por la tarde en el Yankee Stadium. “Intenta que sea simple. Busque lanzamientos dentro de la zona y golpee por el medio ”.
Enfrentarse al equipo de lanzadores de los Orioles, sin duda, ciertamente ayuda a cualquier bateador a encontrar un ritmo. Y cuando ese bateador lleva un uniforme de los Yankees, las probabilidades aumentan.
El miércoles marcó la 16ª victoria consecutiva de los Yankees sobre los Orioles esta temporada cuando terminaron 17-2 contra los habitantes de las bodegas del Este de la Liga Americana.
Según Elias Sports Bureau, esta es la primera vez que los Yankees realizan al menos cinco barridos de serie contra un oponente desde que barrieron seis series contra los Atléticos de Kansas City en 1957.
Dondequiera que fueron los Yankees el miércoles por la noche, no podían ser criticados por levantar una copa de champán con pequeñas burbujas y un alto precio en honor a los Orioles, ayudándolos a acelerar hacia su primer título de la Liga Este en siete años.
La victoria número 14 de los Yankees en 16 juegos elevó el mejor récord de la Liga Americana a 81-41 y llevó su ventaja sobre los Rays de segundo lugar a 9 ½ juegos, en espera del resultado del juego de los Rays-Padres el miércoles por la tarde.
