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Grupo de peloteros hizo juego secreto

Grupo de peloteros  hizo juego secreto

Mientras que las Grandes Ligas de Béisbol se cerraron durante casi cuatro meses en medio de la pandemia de coronavirus, algo así como un campo de sueños de cuarentena operaba en secreto en Palm Beach, Florida.

Según Britt Ghiroli, de The Athletic, un grupo de más 30 jugadores, incluido el as de los Nacionales de Washington Max Scherzer, el derecho de los Astros de Houston Justin Verlander, el toletero de los Yankees de Nueva York Giancarlo Stanton y el primera base de los Cardenales de San Luis Paul Goldschmidt, se congregaron en Palm Beach Gardens. High School para celebrar un campo de entrenamiento improvisado.

En dos ocasiones, los entrenamientos se transformaron en juegos de béisbol al estilo sandlot de nueve entradas que habrían sido eventos imperdibles si estuvieran disponibles para el público.

Según Eric Cressey, propietario del Cressey Sports Performance Gym y organizador del campo de entrenamiento secreto de la temporada de béisbol, grabó algunos videos de ambos juegos. Eventualmente, un carrete destacado puede ser lanzado al público.

Sin embargo, Cressey dijo que la transmisión y la promoción de un evento de este tipo durante el cierre y durante las negociaciones para reiniciar la temporada pueden no haber ido bien.

Si el nombre de Cressey es familiar para algunos fanáticos, es porque los Yankees lo contrataron este invierno para supervisar su entrenamiento, fuerza y acondicionamiento.

bviamente, este campamento no se limitó solo a los jugadores de los Yankees. Lo abrió a cualquiera en el béisbol que necesitara un hogar para continuar sus preparativos.
Seguridad, salud y sigilo

Con un grupo tan grande de jugadores reunidos en una instalación, Cressey dice que crear un ambiente seguro y mantener el campamento discreto fueron desafíos y prioridades que su equipo logró cumplir y defender.

“La parte de salud y seguridad fue difícil. Teníamos que tener grupos realmente pequeños, usar los 10,000 pies cuadrados de la instalación ”, dijo Cressey a The Athletic. “Pero el aspecto de seguridad probablemente fue aún más desafiante, ser discreto y darles a estos muchachos un elemento de privacidad. Los muchachos decían que era como ‘Fight Club’ o Prohibition baseball”.

“Si la gente supiera lo que estábamos haciendo, habríamos tenido 10,000 personas en la Preparatoria Palm Beach Gardens para vigilarnos”.

El no esta mintiendo. En un momento en que los fanáticos anhelan el contenido deportivo, la idea de ver MLB All-Stars haciendo retroceder el reloj a sus días de infancia habría tenido un gran atractivo.

No era solo béisbol, tampoco. El campamento de Cressey también incluía jugadores de la NFL. El mariscal de campo de los Indianapolis Colts , Jacoby Brissett, estaba haciendo pases a mano. En varios puntos, el apostador Matt Bosher envió pelotas de fútbol sobre las cabezas del grupo MLB.

La conclusión más importante: no hubo casos conocidos del virus entre los jugadores en el campamento de Cressey.

Por supuesto, para que los juegos reales sean lo más seguros posible, algunas reglas tuvieron que ser modificadas.

Por: Chris Cwik
Colaborador de Yahoo Sports

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