El Nacional
La prohibición del aborto por la Asamblea Nacional para darle rango constitucional y otros asuntos aprobados ayer no son definitivos, porque les falta una segunda lectura, en la que habría la posibilidad de que ser enmendados.
El reglamento aprobado hace dos semanas por los asambleístas acordó que para mayor transparencia y democratización de las enmiendas de cada artículo de la Carta Magna se conocerá en dos lecturas, al igual que los proyectos de leyes.
Los artículos aprobados en primera lectura van a una comisión que preside el asambleísta reformista Frank Martínez, quien junto a otros colegas pondera lo sancionado para evitar contradicciones.
Luego lo remite al pleno de la Asamblea para que lo ratifique o modifique en una segunda lectura.
La segunda lectura de los artículos aprobados se hará cuando la Asamblea concluya el conocimiento del proyecto de reforma a la Constitución sometido por el presidente Leonel Fernández.
En las modificaciones anteriores a la Constitución las enmiendas se conocían en sólo una lectura.
La ginecóloga Liliam Fondeur pidió a los asambleístas que recapaciten para que en la segunda lectura voten contra el artículo 30 del proyecto de reforma a la Constitución, que establece que el derecho a la vida es inviolable desde la concepción hasta la muerte.
Sostuvo que con la acogida del artículo 30 lo único que se ha abortado es la esperanza de la gente, la posibilidad de un nuevo país y un proyecto de nación que respete los derechos de las mujeres.
Opinó que al rechazar el aborto terapéutico, los asambleístas han actuado de espalda a la población y han actuado con doble moral.
La aprobación del artículo 30 dando rango constitucional a la prohibición del aborto dividió al bloque de legisladores del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) por posiciones encontradas entre sus miembros.
El asambleísta del PLD y presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, junto otros 22 colegas se mantuvo firme en su oposición al artículo 30 y en su defensa a la legalización del aborto terapéutico.
De nada valieron las reuniones y encuentros de la dirección del PLD con esos asambleístas, quienes mantuvieron su posición hasta el final, cuando fue derrotada por sus compañeros de bancada y con los votos perredeístas y reformistas.
La Asamblea Nacional rechazó una propuesta del presidente de los diputados, licenciado Julio César Valentín, presentada a nombre del bloque de legisladores del PLD para modificar el artículo 30 sugerido por Fernández sobre el aborto.
Valentín sugirió que ese artículo fuera sustituido por el número cuatro de la Carta de los Derechos Individuales de la Organización de los Estados Americanos (OEA) de 1969, que establece que: Toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley. En general, a partir del momento de la concepción nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente.
Grupos feministas presentes durante los debates de la Asamblea Nacional calificaron como fascista y machista, la aprobación del artículo 30, por entender que afecta los derechos de las mujeres.
Sergia Galván, del Foro de Mujeres por la Reforma Constitucional, advirtió que la prohibición de todo tipo de aborto contribuirá a la proliferación de los abortos ilegales.
Manifestó que habrá que esperar cómo el Estado cumplirá su compromiso de reducir el 47 por ciento de muertes maternas que se registra en el país y cuál será el destino de las mujeres que no podrán utilizar métodos anticonceptivos, cuando entre vigencia el artículo 30.
Mientras, el coordinador de la Pastoral Juvenil, Padre Luis Rosario, consideró que ganó la vida con la aprobación del referido artículo que defiende la vida desde la concepción hasta la muerte.
Agregó que si se hubiese aprobado el aborto, la República Dominicana aparecería en el mapa de las naciones que menor aprecio tienen por los valores morales. Rechazó que la Iglesia Católica haya chantajeado a asambleístas para que votaran en contra de la legalización del aborto.
Los trabajos de la Asamblea Nacional continúan a las 4:00 de esta tarde.