Semana

Las dietas desintoxicantes:  ¿Realmente  funcionan?

Las dietas desintoxicantes:  ¿Realmente  funcionan?

Si has descuidado tus hábitos alimenticios en los últimos tiempos, puede que la idea de una desintoxicación o detox te sea atractiva: te ayudaría a eliminar los excesos cometidos y comenzar de cero.
Existen muchos productos que ofrecen esta ayuda, desde masajes y batidos desintoxicantes hasta tés de hierbas y dietas de hambre.

Muchos de ellos prometen una piel más brillante, pérdida de peso y una vida más saludable.
La idea de limpiar tu organismo de las impurezas suena como una buena manera, pero ¿hay alguna evidencia de que funcione?.

La palabra desintoxicación se usa a menudo de dos maneras muy diferentes.
La primera se refiere a los programas médicos de desintoxicación que ayudan a limpiar a las personas con una dependencia grave de alcohol o drogas.

La otra se refiere al tipo de desintoxicación en el hogar que nos vendieron bajo la promesa de que eliminarían las “toxinas” de nuestro cuerpo.

Entonces, ¿en qué medida funcionan las dietas detox?

Estos procedimientos van desde simplemente eliminar el alcohol, la cafeína y el azúcar refinada, hasta dietas mucho más estrictas en las que solo se bebe líquidos durante varios días, antes de reintroducir gradualmente pequeñas cantidades de alimentos.

En 2012, Edzard Ernst, profesor emérito de medicina complementaria de la Universidad de Exeter, intentó una revisión sistemática de la literatura existente sobre estas dietas, pero encontró imposible aislar suficientes estudios sobre el tema, porque mucha de esta literatura tenía que ver con estudios sobre programas para la desintoxicación de drogas.

En 2014, dos investigadores de Sydney, Australia, lograron publicar una revisión de estudios sobre dietas de desintoxicación.

Los estudiosos no pudieron encontrar ensayos controlados aleatorios de dietas de desintoxicación comerciales, aunque sí encontraron una pequeña cantidad de estudios sin grupos de control.
Por ejemplo, en una investigación sobre una dieta de desintoxicación de siete días, llevada a cabo en 2000 con solo 25 personas, los participantes se sintieron más sanos después del estudio y hubo una tendencia hacia una mejor función hepática.

La mejoría, sin embargo, no fue estadísticamente significativa.

También encontraron ensayos pequeños que analizaban la eliminación de toxinas específicas del cuerpo, pero nuevamente la mayoría eran pequeños, no incluían controles o tenían otras fallas.

Los autores concluyeron que existe una falta de elementos que prueben que las dietas detox tienen un efecto beneficioso.

Anécdota vs. realidad

Estos elementos sitúan a la popular moda en el plano de lo anecdótico.
Las personas que realizan dietas rápidas o ayunos con jugos generalmente pierden peso a corto plazo, pero es difícil encontrar pruebas de que se mantengan en ese peso a largo plazo.
Entonces, ¿vale la pena molestarse en seguir una dieta detox?

En el caso del alcohol, es más saludable evitarlo por varios días cada semana del año, que por unas pocas semanas durante una sola desintoxicación.

Por supuesto, también es beneficioso para la salud dedicar un período de tiempo a comer más frutas y verduras.

Las soluciones rápidas no son tan beneficiosas como el seguir una dieta mediterránea y hacer ejercicio físico con frecuencia. Pero la idea de desintoxicación es algo que muchos encuentran atractiva.
Si te sientes bien al castigarte compensando tus excesivas indulgencias, tal vez sean tus pecados y no tus toxinas lo que estás dispuesto a lavar.

De cualquier manera, es posible que psicológicamente una desintoxicación pueda ayudarte a tener un nuevo comienzo, una ruptura entre tus viejos hábitos y los nuevos que te gustaría adquirir.

Sin embargo, debes tener un plan para lo que pueda suceder a continuación, o tus viejos hábitos volverán.
Tal vez la manera en que deberías pensar en las dietas detox es como una metáfora más para deshacernos de los viejos hábitos, en lugar de algo que elimina las impurezas del intestino y los órganos.

El cuerpo humano se desintoxica constantemente sin necesidad de tés, jugos o dietas especiales.

Pero puedes ayudarlo a hacer su trabajo comiendo una dieta saludable, tomando agua, haciendo ejercicio regularmente y durmiendo las horas necesarias.

Fuente: BBC Mundo.

El Nacional

La Voz de Todos