El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, doctor Bautista Rojas Gómez, encabezó la liberación de 50 neonatos, hijos de la tortuga carey Güiby, que el 30 de agosto pasado puso 215 huevos en la playa de Güibia.

En la actividad participaron 30 estudiantes del Instituto Politécnico Pilar Constanzo, de Villa Duarte, quienes colocaron las tortugas recién nacidas en la arena de la playa de Sans Soucí, para que éstas, de forma natural, entren al mar.

Los demás huevos de Güiby siguen su proceso de eclosión y los neonatos, alrededor de un centenar, serán liberados en la noche del jueves en la playa de Güibia donde fueron colocados por la carey. De ese lugar fueron trasladados a un nido creado especialmente las instalaciones del Acuario Nacional para evitar que fuesen depredados.

La tortuga carey (Eretmochely simbricata) bautizada como Güiby, de aproximadamente 70 años de edad, pone sus huevos en la playa de Güibia cada año, por lo que el Ministerio de Medio Ambiente ha colocado una vigilancia permanente en el lugar para proteger sus nidos, al igual que el nido de otra tortuga carey que hace un mes siguió los pasos de Güiby.

Las tortugas carey están en peligro de extinción debido a la fama inmerecida de que sus huevos son un potente afrodisíaco, y además su carne y caparazón tienen mucha demanda, provocando la disminución de poblaciones enteras de esta especie.

Gracias al programa de protección de tortugas, este año en las Playas el Valle, Limón y Cosón de Samaná se han contabilizados 15 nidos de tortugas Dermochelys Coriácea (tinglar) de los cuales eclosionaron nueve nidos con aproximadamente 1,200 neonatos que se dirigieron al mar.

También se ha contactado 75 nidos de los cuales eclosionaron 25 de tortugas carey, con un total de 2,521 neonatos emergidos que se dirigieron al mar.