Agradece editorial
Señor director:
En nombre de mi familia y en el mío propio, quiero expresarle las más sinceras gracias por dedicar a nuestro progenitor, el mayor general Elías Wessin y Wessin, el editorial del domingo 19 de abril del año en curso.
En dicho editorial, coloca usted la figura de nuestro padre en una diversidad de perspectivas que culminan con la verdad histórica de que, tanto sus amigos como sus adversarios, coinciden en definirlo como militar honrado, valiente, leal, ciegamente apegado a sus convicciones y, en el plano civil, un ejemplo de buen padre, buen amigo y buen esposo.
Como legatario de estas prendas, le aseguro que en nuestras manos se multiplicarán, y hago votos sinceros porque el Todopoderoso le dé larga vida para auditar nuestra conducta pública, confiado en que ella llegará a satisfacer las expectativas que crea esta afirmación.
Con sentimientos de estima y consideración,
Atentamente,
Elías Wessin Chávez
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Consejos del Papa
Señor director:
Con relación a las declaraciones que hizo el Papa Benedicto XVI, en el sentido de que el gobierno dominicano tiene que trabajar con manos mucho más enérgicas para erradicar definitivamente la corrupción, el narcotráfico y la pobreza que hoy campean de manera incontrolable en la sociedad, parece ser que estas declaraciones han causado ronchas y pánico a funcionarios y a sectores comprometidos con el gobierno.
Es muy extraño que alguien trate de responsabilizar al Partido Revolucionario Dominicano (PRD), de orquestar y promover una campaña negativa para decirle al Papa que diga lo que dijo.
Además, que alguien me explique cómo es posible que la Iglesia Dominicana minimice las observaciones y consejos del Sumo Pontífice, sobre todo cuando los obispos dijeron que el Papa sabe todo lo que pasa en el país con los informes que recibe continuamente de ellos (pura contradicción).
Ahora bien, el gobierno tiene que entender que el Papa no dijo nada nuevo porque hace tiempo, y hay que decirlo con responsabilidad, que la corrupción ha desacreditado al Gobierno y a muchos otros sectores de la sociedad dominicana.
En ese tenor, hay que señalar que el gobierno que encabeza el Presidente Leonel Fernández no debe sentirse ofendido por tales señalamientos. Más bien ha de acoger como un consejo bueno y sabio, pero sobre todo con mucha humildad, porque son observaciones de un ser humano de las dimensiones del Sumo Pontífice, quien además en Occidente y ante los cristianos católicos se tiene como el representante de Dios en la Tierra.
Yo considero que a las autoridades dominicanas no les conviene pelearse con El Vaticano, más bien debe asumir estos sabios consejos para establecer un puente de avenencia que le sirva de soporte para tratar de lograr el camino de exterminar y erradicar la corrupción, el narcotráfico, la impunidad del delito de Estado y la inseguridad.
Erradicando todos estos males, entonces podemos decir que nos convertimos en un pueblo encaminado hacia la honestidad y sí podemos decir que vamos pa` lante y rumbo al progreso.
Atentamente,
Danilo Valentín