Opinión

¡Madre de las aguas!

¡Madre de las aguas!

POR:  Max Puig

maxpuig@gmailk.com

 

Desde 1992 el 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua. Naciones Unidas invita a realizar en este día actividades relacionadas con la conservación y el desarrollo de los recursos hídricos, recordando que el agua es un derecho humano. Cada año se selecciona un tema específico para la celebración, siendo el de este año “agua y energía”. La demanda de agua dulce y energía seguirá aumentando significativamente en las próximas décadas. Este incremento conllevará grandes desafíos.

A estos desafíos les debemos poner la mayor atención. Somos un territorio insular pequeño donde la población urbana crece aceleradamente, mientras la disponibilidad de agua decrece por la reducción de los caudales de los ríos a causa de la deforestación y el descuido de las cuencas hidrográficas, y por la contaminación ambiental urbana, industrial, agropecuaria, hotelera y minera que convierte a los ríos en cloacas urbanas.

A lo anterior se suma el hecho de que más del 50% del volumen total del agua servida a las redes de los acueductos no llega a las residencias fruto de múltiples fugas por averías, y que al mismo tiempo cerca de un 20% del líquido que llega a los hogares se desperdicia por la falta de una cultura del uso racional del agua.

La principal zona productora de agua de la República Dominicana es la Cordillera Central. Allí se encuentra Valle Nuevo, considerado como “madre de las aguas”. Luego, este concepto se hizo extensivo a otras zonas de la Cordillera Central.

A partir de esta idea, en 2007 se unieron en una asociación los municipios de Jarabacoa, Constanza, Jánico, San José de Las Matas y Monción, constituyendo la Mancomunidad de Municipios Madre de las Aguas. Su tema articulador es ” el agua como recurso vital para la supervivencia de los pueblos serranos, del país y del mundo”. Hoy día nuestra Madre de las Aguas está gravemente amenazada por un proyecto insensato, dirigido desde la cúspide misma del gobierno de la República.

Se pretende, contra todo principio de protección y sostenibilidad ambiental, construir una carretera que atravesaría las áreas protegidas donde nacen las principales fuentes de agua del país. Aprovechemos el Día Mundial del Agua para hacer un nuevo llamado a la cordura y la sensatez a propósito de la carretera ilegal y asesina que se proyecta.

No permitamos que se clave una daga en el corazón de la Madre de las Aguas. Esa daga, al herir gravemente a la Madre Naturaleza, afectará también la vida de los hombres y mujeres que hoy constituimos la patria de Duarte. También limitará las posibilidades y calidad de vida de todos aquellos llamados a nacer en nuestro suelo y formar parte de nuestra comunidad nacional.

El Nacional

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