Johannesburgo, (EFE).- Diego Maradona, que abandonó el Mundial por la puerta de atrás en Estados Unidos’94, cuando dio positivo en el control de dopaje, regresó dieciséis años después a la Copa del Mundo convertido en seleccionador de Argentina, que obtuvo una apurada victoria sobre Nigeria (1-0).

La entrada de Maradona al campo del Ellis Park, con un aspecto que le asemeja al tenor Plácido Domingo, fue saludada por el público con una ovación, y apenas habían transcurrido seis minutos cuando Gabriel Heinze conectó un poderoso testarazo desde el centro del área que se coló por la escuadra derecha de Vincent Enyeama.

El gol mató el partido, que había comenzado de forma fulgurante y se fue enredando hasta perder encanto. Sólo las incursiones de Leo Messi, que se encontró media docena de veces con un inspirado Enyeama, mantuvieron la incertidumbre.

La explosión de júbilo con que acogió Maradona y su cuadro técnico el final del partido ilustra la importancia que tiene empezar un Mundial con victoria y la tranquilidad que proporciona para afrontar sin ansiedad los próximos partidos.

El primer partido del día, en Puerto Elizabeth, registró la primera victoria del Mundial, para Corea del Sur, y alargó el maleficio de Grecia en la Copa del Mundo. Campeona de Europa en 2004, la selección helena participa por segunda vez en un Mundial y sus números no pueden ser peores- ha perdido sus cuatro partidos y no ha marcado un solo gol.

Frente a Corea, en el primer partido del grupo C, a Grecia se le presentaba la oportunidad de mejorar sus estadísticas, pero el conjunto asiático batió al equipo del alemán Otto Rehhagel con insospechada facilidad (2-0). Lee Jung Soo (m.7) y el capitán Park Ji Sung (m.52) ejecutaron a Grecia en un estadio medio vacío.

Inglaterra y Estados Unidos cerraron la segunda jornada con un empate en Rustenburgo, el primero de la historia entre ambos equipos. El equipo que hoy dirige un italiano, Fabio Capello, tendrá que esperar para tomarse la revancha de la derrota frente a Estados Unidos en el único partido de un Mundial que les había enfrentado, hace 60 años.

El capitán, Steven Gerrard, abrió el marcador en solo cuatro minutos, pero una acción desafortunada del guardameta Robert Green en el 41 dejó las cosas como estaban y el marcador no se movió ya en todo el segundo tiempo, pese a que n faltaron oportunidades, sobre todo para Inglaterra.

La jornada había empezado con buenas noticias- todos los controles de dopaje practicados a las 32 selecciones antes del Mundial han arrojado resultados negativos. Una vez empezado el torneo, dos jugadores por equipo, elegidos por sorteo, pasarán el test antidopaje y sus muestras de sangre y orina serán analizadas en el laboratorio de Bloemfontein.

El Comité Organizador se ha felicitado por el éxito de la jornada inaugural. Hemos recibido felicitaciones de todo el mundo, aseguró su portavoz, Rich Mkhondo, que achacó los escasos espacios vacíos en las gradas del estadio Soccer City a los atascos de tráfico.