Los casos registrados de dengue en el 2012 suman más de 2,500 ingresados y ocho muertes, superando las estadísticas del 2011 cuando apenas hubo dos fallecidos y menos de 200 casos en igual fecha, afirmó este sábado el viceministro de Salud Pública, doctor Nelson Rodríguez Monegro.
El funcionario informó que en este año hay 800 casos más de los registrados en el 2011, de los cuales 80 son hemorrágico, mientras que el año pasado hubo 45, y en igual fecha no hubo fallecimiento, y hoy se registran ocho muertes por dengue.
Ayer en el hospital Santo Socorro fueron ingresados ocho niños con dengue, entre estos algunos hemorrágico. En el hospital Robert Reid Cabral también hay más de 20 infantes afectados con ese mal.
Hay una alta incidencia de dengue, y la red pública y privada de salud debe estar alerta, y todas aquellas personas que presenten fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular y otros síntomas, deben ponerse en estado preventivo y tomar las medidas que establece el protocolo, declaró.
El dengue requiere la integración de todos los sectores del país para enfrentarlo, tener conocimiento desde la educación de la gente, conocimiento de la enfermedad, cómo evitar el mal eliminando los criaderos del mosquito, las aguas negras y acumuladas, explicó.
Rodríguez Monegro manifestó que realmente hay incremento del dengue, pero que las autoridades mantienen vigilancia epidemiológica constante en las áreas afectadas, y que se continuará con jornadas preventivas.
Rechazó que el Ministerio de Salud Pública no esté trabajando para frenar el avance del dengue. Estamos realizando jornadas sin mucha publicidad coordinados con juntas de vecinos y barriales, centros de madres, asociaciones campesinas y otros grupos de la población.
Subrayó que el dengue ha tenido un comportamiento cíclico, con la aparición epidémica que se da cada dos años, pero no ha cambiado las condiciones, porque esa enfermedad es un problema social que afecta la salud en general.
Dijo que República Dominicana es un país tropical en que resurgen enfermedades como el dengue, porque llueve constantemente, una de las condiciones más viables para que los criaderos de mosquitos se desarrollen por doquier.