BAGDAD. AP.- Al menos 18 personas murieron el martes cuando un atacante suicida en un automóvil hizo estallar sus explosivos junto a oficinas del Ministerio del Interior en Bagdad, un día después que varios hoteles importantes fuesen atacados en acciones suicidas.
Los ataques de esta semana todos contra edificios prominentes y fuertemente custodiados asistan un nuevo golpe a un gobierno iraquí que pasa problemas para explicar las fallas de seguridad que han permitido a extremistas lanzar una serie de ataques masivos en la capital desde agosto.
Los equipos de rescate revisaban afanosamente los escombros para encontrar víctimas. Funcionarios dijeron que la mayoría de los muertos casi seguramente eran policías que trabajaban en el laboratorio forense en la Plaza Tahariyat, en el barrio de Karradah.
La policía dijo que el atacante del martes trató de rebasar con su auto un punto de control.