La Paz, (EFE).- El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó hoy que el único “fracaso demostrable” en la lucha antidrogas es de Estados Unidos, en respuesta a las críticas a su país y a Venezuela incluidas en el informe anual de Washington sobre el narcotráfico en el mundo.
“El único fracaso demostrable es el de los EEUU- Bolivia y Venezuela son estados soberanos y no sumisos al imperio”, escribió Morales en su cuenta en Twitter. También sostuvo que “la Bolivia colonial bajo dominio imperial» tenía 37.000 hectáreas de hojas de coca, mientras que el “Estado Plurinacional” registra 20.000 hectáreas. «¿Dónde está el fracaso demostrable?”, cuestionó el gobernante, quien se encuentra en Cuba tratándose una infección vírica y una sinusitis que son controlables.
El informe, enviado el jueves por el Departamento de Estado al Congreso estadounidense, señala a Bolivia, Birmania y Venezuela como los países donde existe un “fracaso demostrable” a la hora de implementar sus obligaciones internacionales en la lucha antidrogas. El documento, relativo a 2016, se basa en las recomendaciones emitidas por el expresidente de Estados Unidos Barack Obama (2009-2017) en septiembre pasado, cuando designó a Bolivia, Venezuela y Birmania como responsables de una política fallida en la lucha antidrogas en los doce meses anteriores.
Aunque esa denominación puede implicar sanciones de Estados Unidos, la designación de Obama fue acompañada en este caso de una recomendación al Congreso de que no interrumpiera la asistencia económica a Venezuela y Birmania, que está “en el interés nacional de Estados Unidos”, según el Departamento de Estado.
En el caso de Bolivia, Obama no llegó a estimar que EE.UU. tenga en su “interés nacional” continuar la ayuda, por lo que la asistencia que Washington proporciona a ese país se limita a la humanitaria y de lucha contra el narcotráfico, que es mínima. La hoja de coca tiene en Bolivia usos culturales, rituales y medicinales reconocidos en la Constitución, pero una parte de la producción de la planta es desviada al narcotráfico para la fabricación de cocaína.
Un estudio presentado en julio del año pasado por la Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito (UNODC) certificó que Bolivia tenía en total unas 20.200 hectáreas de coca en 2015. El ministro boliviano de Gobierno (Interior), Carlos Romero, dijo hoy que la superficie de hojas de coca cultivadas en su país representa “menos del 12 %” del total de las plantaciones en la región, mientras que, según dijo, hay una “tendencia ascendente” en los casos de Colombia y Perú.