Como exitosa fue definida por el doctor Ramón Antonio (Negro) Veras la operación que le se practicó el viernes a su hijo el abogado José Jordi Veras en Nueva York, en cuyo proceso se consiguió reparar ambas órbitas de los ojos, la estructura de la nariz y el resto de la cara.
Negro Veras informó además que su hijo está en proceso de recuperación y que ha mantenido un buen estado de ánimo.
En carta enviada a El Nacional, el padre de Jordi dice que los médicos advirtieron que el proceso de recuperación tomará tiempo e implicará otras intervenciones quirúrgicas a corto y mediano plazos. El texto de la declaración es el siguiente:
Tras la intervención quirúrgica de que fue objeto mi hijo, José Jordi Veras, los especialistas que lo trataron en New York consideraron la operación como exitosa por las reparaciones que consiguieron hacer en ambas órbitas de los ojos y en la estructura de la nariz y el resto de la cara del paciente, pero advirtieron que el proceso tomará tiempo e implicará otras intervenciones quirúrgicas a corto y mediano plazo.
El día 2 de junio, en las primeras horas de la mañana, José Jordi sufrió un atentado criminal, recibiendo el impacto de dos balas en la cabeza, por lo que de inmediato fue operado por un equipo de doctores de la Clínica Corominas, en Santiago, quienes lo estabilizaron y prepararon para otras operaciones posteriores referidas por ellos mismos en los Estados Unidos.
En New York, Jordi Veras fue examinado por el especialista en órbita David Della Roca y el retinólogo Eduardo Ponce, del Eye and Ear Infimany, un centro especializado en afecciones de ojos y oídos, quienes recomendaron una intervención quirúrgica a la mayor brevedad para tratar de reparar las cuencas oculares y ayudar a reubicar huesos de la cabeza que estaban astillados y desviados.
Cuando los médicos de New York procedieron a la intervención quirúrgica el viernes 11 de junio, se encontraron con que la condición del paciente era más delicada de lo que los estudios preliminares permitían suponer, ya que ambas órbitas oculares estaban totalmente destrozadas por efectos de la bala que penetró en la parte superior de la cara. En vista de esa situación, procedieron a hacer la reconstrucción de la órbita del ojo derecho y la construcción de la base del ojo izquierdo, utilizando placas de un material especial de alta tecnología, que permitió sustituir el material biológico destruido.
Cuando baje la inflamación resultante de la operación se procederá a la evaluación de ambos ojos. El derecho, con objetivos cosméticos, ya que hasta ahora no ha habido progresos en la visión y el izquierdo para hacerle un tratamiento que le permita la mejor visión posible con el mismo. También será necesario un procedimiento para evitar que el mal estado del ojo derecho desequilibre el ojo izquierdo, cuya situación puede recuperarse completamente.
El equipo que trató a Jordi en la Clínica Corominas estuvo encabezado por los doctores Rafael Estévez Reyes, Sebastián Guzmán, Pedro Guzmán, Luis Cantizano, Víctor Pou, Edward Alonso, César Castillo y Enrique Oquet.
En su informe oficial los citados especialistas explicaron que Jordi Veras llegó a la Clínica Corominas con dos heridas de arma de fuego, «una en la parte superior de la cara con entrada en el área zigomática izquierda, con salida en la parte superior de la órbita derecha que según estudios de imágenes realizados, presentaba fractura de la órbita izquierda y fractura de la órbita derecha con lesión del nervio óptico de ese lado, además sangrado nasal».
Según el mismo informe oficial, la bala inferior entró por el área submaxilar, lado izquierdo. Cruzando hacia el lado derecho del cuello, donde se produjo un hematoma. Ese lado se exploró y se encontró una laceración importante de la vena yugular interna, con sangramiento profuso que fue resuelto con varias suturas, además se extrajo un proyectil metálico que se alojó en esa área y se dejó un drenaje de penrose».
En el centro de New York, en el récord de la información quirúrgica, el doctor Robert Della Roca, diagnosticó la fractura de las cavidades de ambos ojos.
Mi hijo Jordi está en proceso de recuperación y ha mantenido un buen estado de ánimos junto a su esposa Katy Gómez, la cual ha estado a su lado en todo momento.