EL filósofo y lingüista Ludwig Wittgenstein estableció con la autoridad que le daba su saber enciclopédico, que el nacimiento de un nuevo concepto, traía consigo la formación “de un nuevo mundo”. Es innegable pues, que el impacto de la pandemia del Covid 19 estará ligado a psique de los ciudadanos del mundo y sus efectos, que bajo ningún concepto marcarán el fin de la historia, como diría Francis Fukuyama, por lo menos aportarán nuevas variantes en el terreno político. En el caso de la República Dominicana, a menos de dos meses de las elecciones generales, los partidos políticos han emprendido estrategias dirigidas a los afectados del virus y a proteger a los sanos. Aunque existan razones humanitarias, nadie puede negar que hay un impacto en la población votante.
Y como la política no obedece a capricho, sino a realidad, es inocultable, que el partido de gobierno tiene el chance de reponerse, pues dispone de los recursos y las causas justificadas para hacerse sentir positivamente. Ejemplos sobran: El ciclón San Zenón del 1930, le dio la oportunidad a Trujillo para afianzarse en el poder. En el 1979, el Huracán David golpeó inmisericordemente a los dominicanos y el PRD y Antonio Guzmán Fernández, se crecieron ante la crisis para hacer olvidar al doctor Balaguer. De igual manera, la crisis mundial del 2008, fortaleció el liderazgo de Leonel Fernández, quien salió airoso de la misma, contrario a otros gobernantes.
El coranavirus es tan real, como la nueva situación política de cara a las elecciones de mayo. Con el llamado de Luís Abinader a la Unidad Nacional y convocatoria de todas las fuerzas políticas y sociales, el líder opositor hace gala de una jugada maestra, pues se ocupa por la población e intenta compartir las virtudes que los recursos le proporcionan al gobierno, cosa que los estrategas del PLD se resisten.
No ha sido menos genial la ficha jugada por Leonel Fernández. Ha propuesto con antelación algunas de las medidas adoptadas por el gobierno, ha reconocido los aciertos y ha suavizado su oposición, dejando así, una brecha abierta al entendimeinto.
El Covid 19 ha provocado una inevitable segunda vuelta. El PRM mantiene la preferencia, seguido del PLD, mientras que la Fuerza del Pueblo y Leonel Fernández, esperan un vuelco de votos morados, como única opción de alcanzar el poder en una segunda vuelta.
