De nuevo Amy
La cantante Amy Winehouse fue acusada ayer de agresión y disturbio del orden público tras un incidente en un teatro de Londres el fin de semana pasado. Una mujer ue acusada en el marco de un caso de agresión en un teatro de Milton Keynes, dijo la policía.
Golpea director
Amy se presentó voluntariamente en la comisaria de Milton Keynes con su abogado hacia las 13H15 de la tarde, precisó un portavoz de la policía londinense. La cantante, identificada con su nombre de casada, «fue formalmente arrestada, acusada de agresión y disturbio del orden público». Fue liberada pero deberá comparecer ante un tribunal el 20 de enero. La intérprete de «Rehab», de 26 años, está acusada de haber golpeado al director del teatro tras haber interrumpido una pantomima.
Sale de clínica
Oscar D’León abandonó ayer la clínica donde estuvo recluido desde el fin de semana tras sufrir un infarto. Estoy sumamente bien, estoy pero perfecto», dijo el salsero venezolano al canal de noticias Globovisión poco antes de salir de una clínica capitalina.
Suspende shows
D’León, de 67 años, fue sometido a inicios de semana a un cateterismo debido a que tenía una arteria obstruida. Ahora estoy con mucho oxigeno, con mucha habilidad, estoy tranquilo; así que esperen de mi todo», afirmó D’León, quien es conocido como el Sonero del Mundo». El manager del artista Oswaldo Ponte declaró ayer al diario El Universal que D’León estará en reposo hasta el próximo 15 de enero y que por ese motivo suspenderá las presentaciones que tenía pautadas.
Feliciano condena
Un par de productores de radio usaron la música de Feliz Navidad» para escribir una canción de parodia que se refiere despectivamente a los inmigrantes indocumentados y el cantante puertorriqueño José Feliciano no está nada contento.
Un puente cultural
Cuando escribí y compuse ‘Feliz Navidad’, opté por cantar tanto en inglés como en español con el fin de crear un puente entre dos maravillosas culturas durante la época del año en la que esperamos buena voluntad hacia todos», expresó Feliciano ayer. En vez, el atroz discurso de odio presentado en ‘Illegals in my Yard’ (Ilegales en mi jardín) es repugnante para todos los que atesoramos el verdadero significado de la Navidad. Deberían estar profundamente avergonzados».