Lo suyo es guerrear
Al atacar a Irán no hizo más aumentar las tensiones en la convulsa región. No le basta con la guerra de exterminio en Gaza, sino que su deseo es propagar la conflagración. Sus aliados, que condenaron a Irán por sus ataques, le habían aconsejado que no respondiera, porque temen las consecuencias. Pero lo suyo es guerrear.