Cuatro de los 21 cadáveres del naufragio recuperados este miércoles fueron enterrados en una fosa común en el cementerio municipal de Sabana de la Mar, en la provincia Hato Mar.
La medida se llevó a cabo ante la descomposición de los cuerpos y la falta de identificación.
Los cuatro fueron sepultados envueltos en lonas y fundas plásticas en terreno donado por la alcaldesa de la comunidad, Audra Saldaña.
Con el hallazgo de este miércoles son más de 40 los cuerpos hallados en aguas del Atlántico.
De los cadáveres encontrados este miércoles, uno fue traslado a Samaná por sus parientes en una yola; otro a San Francisco de Macorís en un camión.
Sin embargo, un grupo aún indeterminado oriundo de la misma demarcación fue trasladado allá en un camión enviado por sus autoridades para ayudar a las personas que no tenían recursos para hacerse cargo de los gastos.
El naufragio de la yola, en la que alegadamente iban 75 personas, ocurrió la madrugada del sábado en en la Bahía de Samaná, pero hasta el momento se rescataron con vida 17 y permanecen varias desaparecidas.