Deportes

Toques

Toques

Héctor García

¡Peloteros, abran los ojos!
Ha tenido trascendencia pública la crisis de la Federación de Peloteros Profesionales (FENAPEPRO), la que agravó con la celebración de “elecciones” al margen de sus estatutos.

Antes de esas “elecciones” existía una directiva con un nuevo presidente, George Bell, en lugar del renunciante, Mario Melvin Soto.

La crisis tomó fuerza con el enfrentamiento de Soto con varios periodistas.
Conforme observación objetiva de los hechos, se ha intentado dar un golpe de estado a la directiva de FENAPEPRO y de algún modo la Liga de Béisbol Profesional (LIDOM) luce estar involucrada en esa acción.

Los hechos y las razones se explican por sí solas: Asalariados de LIDOM se involucraron en asuntos propios de FENAPEPRO.

El asalariado de LIDOM, el ex pelotero Erick Almonte, aparece como Presidente por unas elecciones realizadas en aparente desconocimiento de lo que dicen los estatutos de FENAPEPRO.

Nadie en el sindicato promovió esas elecciones, conforme el reglamento estatutario.

Lo cierto es que, más que ilegal, es dar una estocada mortal a la ética del béisbol el recibir un sueldo de LIDOM, que es una entidad patronal formada por los dueños de los equipos, y a la vez pretender representar a los obreros del béisbol, que son los peloteros.

Eso es un contrasentido, una inmoralidad o una incongruencia, o como se le quiera llamar.
Eso atenta contra los intereses de los peloteros, que son muy diferentes
a los intereses de los dueños de los equipos que conforman la LIDOM.

Debe quedar claro que quien trabaje o haya trabajado para LIDOM no puede tener jamás calidad ni puede tener derecho a aspirar dirigir o ser directivo del gremio de peloteros, porque aunque haya sido jugador, ya se definió estar al lado de los patronos e intereses de LIDOM, vale decir, del lado opuesto a los intereses de los peloteros.

Pero lo peor de la crisis no es solo que LIDOM luce estar involucrada en una emboscada contra FENAPEPRO, sino que muchos peloteros se han dejado utilizar e influenciar, aprovechándose de su ingenuidad.

Si las elecciones donde funge como ganador Erick Almonte no fueron realizadas por iniciativa de FENAPEPRO, ningún tribunal podrá aceptar, ni jamás podrá proclamar o ratificar, que ese empleado de

LIDOM, sea reconocido como el legítimo presidente de FENAPEPRO.
Hasta prueba en contrario, como dicen los abogados, el activo de la Federación de Peloteros en bancos y propiedades, que se dice ascender a 150 millones de pesos, puede ser la razón del golpe de estado contra ese sindicato de peloteros.

No es tampoco ético que LIDOM permita que uno de sus empleados presida el gremio y el Presidente Vitelio Mejía está obligado a pronunciarse en este sentido.

LIDOM debe demostrar con hechos no haberse involucrado y no tener interés de que un asalariado suyo sea Presidente de FENAPEPRO, porque no se puede estar con Dios y con el Diablo.

¡Ojo peloteros! No permitan que sus intereses sean manejados por quien recibe un salario de LIDOM.
¡Los patronos no son sus aliados, sino sus contrarios!

El Nacional

La Voz de Todos