Editorial

Valió la pena

Valió la pena

El presidente Leonel Fernández  ha logrado el compromiso de su colega francés Nicolás Sarkozy  de asumir con  vigor y claridad la situación de Haití para  poder garantizar estabilidad política  y reactivación económica  en ese agobiado país.

Durante una audiencia  oficial   en el Palacio del Elíseo, el presidente Fernández reiteró ante el mandatario galo el reclamo dominicano para que la comunidad internacional acuda en auxilio de Puerto Príncipe.

El compromiso de Sarkozy, de asumir un papel  de mayor protagonismo en la cooperación hacia Haití, puede estar relacionado con  la  intervención  de Fernández ante un Comité de la Asamblea Nacional,   durante la cual rechazó el pedido de desmilitarización de la frontera, así como reiteradas insinuaciones de una fusión domínico haitiana.

Sin renunciar a la voluntad del lado dominicano de  contribuir al progreso de Haití, mediante aportes en la salud, educación y empleo, el jefe de Estado definió como inaceptable desmilitarizar la franja fronteriza y reivindicó la condición de nación  soberana de República Dominicana.

 Ese vigoroso discurso  ante el Parlamento francés sirvió de alfombra en el Palacio del Elíseo para una conversación  digna, franca y respetuosa con  el presidente Sarkozy, donde no hubo recriminaciones ni insinuaciones en torno al desempeño que debe asumir República Dominicana  ante el drama haitiano.

Por el contrario, el Presidente dominicano logró  el compromiso de Sarkozy para que  Francia formule un llamado a la comunidad internacional y ofrecer un verdadero respaldo a la patria de Toussaint Louverture.

Se resalta el ofrecimiento francés de financiar proyectos en los ámbitos de transporte, energía y turismo, incluida  la segunda línea del Metro y el proyectado tren Haina-Santiago.

  Porque rechazó pedidos e insinuaciones de abrir la frontera y asumir el tema de la fusión con Haití, el presidente   Fernández pudo hoy presentarse en el Elíseo como un auténtico jefe de Estado de una nación que no negocia su soberanía.

El Nacional

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